El avance de la quinta ola y la tímida evolución del turismo internacional ha obligado a cambiar las previsiones de negocio con las que la hostelería encaraba la campaña de verano. Los dueños de bares y restaurantes sabían ya que, a pesar del ahorro acumulado y las ganas de los españoles por desplazarse de vacaciones, su nivel de facturación no podría alcanzar todavía las cotas del verano previo a la pandemia.

Sin embargo, la expansión de los contagios y la todavía lenta recuperación de los viajeros extranjeros ya se deja notar en las cuentas de los negocios en plena campaña estival, que deben hacer frente a diversos niveles de restricción en función de la Comunidad en la que se encuentren.

Si la patronal Hostelería de España contaba antes con facturar entre un 20% y un 30% menos que en el mismo período de la etapa precovid, "ahora hemos empeorado la previsión y ya estamos pensando en una cifra de negocio de entre un 30 y un 40% menos que hace dos años", explica su presidente, José Luis Yzuel. "Y eso se traduce en una disminución de ingresos de en torno a 10.000 millones de euros", añade.

Durante su comparecencia en Moncloa para hacer balance de gestión antes de las vacaciones, el presidente del Gobierno Pedro Sánchez presumió de que "España tiene la medalla de oro en vacunación" y de que es "líder" en previsiones de recuperación económica. "Si alguien desea instalarse en la negatividad, en el pesimismo y en la confrontación, ya les adelanto que no van a encontrar al Gobierno de España", apuntó.

Pero el optimismo exhibido por el jefe del Ejecutivo se aleja de las previsiones de los negocios que siguen denunciando no haber recibido aún el grueso de las ayudas directas aprobadas hace semanas por el Consejo de Ministros y que ahora deben entregar ahora las Comunidades. "Tras más de año y medio cerrados, el ocio nocturno de Cantabria sólo ha recibido 3.000 euros", se queja Yzuel.

Ahora bien, el golpe por la nueva ola de contagios irá por barrios. Desde la patronal están convencidos que los destinos de la cornisa cantábrica tendrán un comportamiento mucho mejor que otros lugares, más dependientes del turismo extranjero, que sí se seguirán viendo muy perjudicados por la falta de negocio.

En la misma línea que la patronal nacional de hosteleros, la Asociación Madrileña de Trabajadores Autónomos (AMTAS-UPTA) avisaba este miércoles de que la recuperación en el sector de los autónomos ha entrado en "punto muerto". En este sentido, aseguran que el 60% de negocios de hostelería y comercio siguen por debajo de niveles del verano de 2019.

"Las restricciones que están padeciendo muchas comunidades autónomas por causa de la covid-19 están haciendo que los peores presagios se cumplan y que los autónomos sientan cómo pasa el verano sin que mejore la situación de sus negocios", lamentaban.

Dudas sobre el pasaporte covid

Por otro lado, desde la patronal hostelera muestran muchas dudas a la hora de exigir el denominado pasaporte covid para el acceso a los locales, que este mismo jueves echaba abajo el Tribunal Superior de Justicia de Canarias, la única Comunidad junto a Galicia que hasta ahora lo exigía en determinados locales.

"Lo vemos realmente difícil y complicado por la potente inseguridad jurídica que genera. Sólo se puede admitir si supone eliminar los cierres y nos quitan todas las restricciones", añade Yzuel. Este mismo jueves, algunas Comunidades como Aragón, Cantabria o Andalucía aseguraban estar planteándose seriamente la posibilidad de exigir el certificado.

Sin embargo, La Federación Nacional de Empresarios de Ocio y Espectáculos tachaba de "desastre económico" el hecho de que el Ministerio de Sanidad lo haya dado casi por descartado a nivel nacional, ciñendo su uso a la movilidad.