El Gobierno está trabajando, in extremis, en cerrar un acuerdo con sindicatos y organizaciones de empresarios para subir el salario mínimo interprofesional (SMI) este año y los dos próximos. Si el incremento no se aprueba en los próximos 15 días, no afectaría al mes de septiembre, sino solo a octubre, noviembre y diciembre.

Desde el Ministerio de Trabajo aseguran que aún no descartan conseguir el sí de la patronal CEOE, que hasta ahora ha mantenido que no es el momento de subir los salarios, cuando multitud de pymes se encuentran en una situación crítica después de la crisis.

El Ejecutivo planeaba pactar y aprobar dicha alza a principios de este mes, pero la negociación se ha tornado más complicada de lo esperado y desde el Gobierno tienen la intención de conseguir el sí de los empresarios para lograr el que representaría su undécimo acuerdo en el marco del diálogo social, y también para facilitar el resto de negociaciones que hay sobre la mesa (pensiones, reforma laboral y ERTE).

En la primera reunión entre Trabajo, CCOO, UGT, CEOE y Cepyme, que tuvo lugar el 1 de septiembre, el Gobierno propuso subir el SMI 15 euros al mes lo que queda de año, 31 euros en 2022 y otros 31 euros en 2023. Ahora mismo, el salario mínimo está congelado desde enero en los 950 euros al mes, pero la ministra Yolanda Díaz ha mantenido que, en un contexto de recuperación económica, no pueden quedarse atrás quienes tienen peores sueldos.