Telefónica no cierra las puertas a una hipotética venta de uno de sus mayores activos. La fibra óptica en España es uno de los baluartes de la compañía de telecomunicaciones, pero si llega una buena oferta será estudiada.

Bloomberg adelantó que la compañía estudia dar entrada a un socio a su red de fibra óptica en España e incluso estaría valorando la posibilidad de vender una participación en la misma. Pero según narran fuentes del sector a este periódico, la compañía solo vendería hasta una cuarta parte del negocio del activo más importante que posee en su cartera. 

Una operativa que conoce muy bien ya que las últimas ventas importantes como las torres de telecomunicaciones o la fibra óptica en Brasil lo ha hecho de una manera similar. Si bien la teleco no confirma a este periódico esta posibilidad, otras fuentes consultadas explican que “si llega una oferta atractiva, se valoraría cual es el encaje para poder ingresar una importante cantidad de dinero y no desprenderse del activo”.

En otras alianzas Telefónica y Allianz se reparten a partes iguales el 50% de participación en una compañía en Alemania, con un modelo de control compartido. Así Telefónica Infra tiene el control del 40% y Telefónica Deutschland/O2, un 10%, frente al 50% de Allianz Capital Partners. 

El banco de inversión Citi emitió un informe para sus clientes en los que aseguraba que Telefónica debe dar entrada a nuevos socios en la fibra óptica de España ya que “debería ser el factor más importante para mitigar la presión sobre otras áreas de negocios como es la comercial”.

A su vez, indicaban que dicha operación debe ser suficiente “para proteger a los accionistas de una caída de los beneficios”. “ Es su bala de plata para levantar el precio de su cotización”, finalizaban los analistas. La fibra óptica es una de las joyas de la corona de Telefónica y, de acuerdo a las fuentes consultadas, dicho activo podría estar valorado en hasta en 20.000 millones de euros. 

Fuentes del sector explican a este periódico que tanto los bancos de inversión como los fondos han encontrado en España una oportunidad de oro para acometer inversiones en un activo tan “valioso como la fibra”. “Estas sociedades están moviendo el árbol puesto que ven que nuestro país es uno de los más desarrollados tecnológicamente y ya se han producido las primeras ventas por lo que van a ser agentes importantes en los próximos meses”, apostillan.  

Otra de las ventas que Telefónica también tenía encaminadas era la del cable submarino. En la actualidad, la red está integrada por algo más de 100.000 kilómetros de extensión y el precio de una posible venta estaría cifrada en unos 2.000 millones de euros, según estimaciones del sector. No obstante, fuentes conocedoras de las negociaciones admiten que las conversaciones con los interesados se han enfriado y no se esperan novedades relevantes en las próximas semanas. 

Telefónica irá de compras

Pero de ocurrir este supuesto, fuentes de la compañía explican que la estrategia a la hora de destinar el contenido será diferente a la que venía realizando hasta ahora. El dinero de las últimas ventas o la entrada al capital de ciertos activos se destinó a reducir deuda, una de las principales preocupaciones de José María Álvarez-Pallete. De hecho, desde su llegada, el presidente de la empresa de telecomunicaciones ha eliminado casi 20.000 millones de euros de deuda.

Así, Telefónica entiende que deberá acometer importantes operaciones por lo que la compañía explorará compras y adquisiciones para crecer en sus diferentes áreas de negocios en las que opera para dar un paso adelante de cara a los inversores puesto que pueden entender que “eliminar solo deuda ya no es suficiente”, recalcan las mismas fuentes consultadas. 

En esta nueva fase, según relatan las mismas voces, en la que se encuentra inmersa Telefónica también explorará la adquisición de espectro 5G en sus regiones preferenciales que marcan su hoja de ruta pues la teleco entiende que el futuro del sector pasa por dicha tecnología.