Los precios siguen creciendo mes a mes. El dato provisional correspondiente al índice de precios al consumo (IPC) de noviembre, publicado este lunes, dejó una subida del 5,6% con respecto al año anterior. Es el undécimo mes al alza y además de los carburantes, los precios de la alimentación contribuyen a que este sea el dato más alto en 29 años.

Se acercan las reuniones, comidas y cenas de Navidad. A nivel personal y profesional, las agendas se llenan de encuentros en los que estos precios tendrán una repercusión importante. Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en lo que va de año la alimentación y las bebidas no alcohólicas se encarecen un 3%. Se trata del mayor avance en acumulado anual desde 2012.

En los últimos meses, la energía y los carburantes han liderado las subidas que han influido en la evolución de los precios. No obstante, en la publicación de este dato adelantado, el INE subraya el incremento en la alimentación. Desde CaixaBank Research apuntan que "el sector de la alimentación probablemente se está viendo forzado a traspasar el aumento de sus costes (debido a los altos precios de la energía) a los consumidores. Esta situación se acentúa al tratarse de un sector calor intensivo (tiene mucha demanda de energía), con pocos márgenes de beneficio y una demanda relativamente inelástica".

De hecho, tal como publicó este periódico, la factura de la luz ha encendido las alarmas en los supermercados. Al margen de los recursos humanos, «la energía ha pasado a ser uno de los primeros costes fijos de la distribución alimentaria. Su incremento en los últimos años ha encendido las alarmas en nuestro sector, que puede ver comprometida su sostenibilidad en los próximos meses», advertía Ignacio García Magarzo, director general de la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (ASEDAS). «Las empresas están absorbiendo la subida de los costes y la situación no va a ser fácil. La inflación está aflorando y en los próximos meses va a ser peor», advertía el presidente de la asociación de fabricantes y distribuidores (Aecoc), Ignacio González.

Los expertos dan por hecho que el IPC seguirá al alza hasta el próximo año, por lo que no está previsto que los precios se moderen de cara a Navidad, cuando el consumo, en alimentación y otros productos, crece. Por ello, si la inflación continúa esta senda alcista ésta sería la Navidad más cara en casi una década.

Por productos

Para conocer cuál es el aumento acumulado en los distintos productos habrá que esperar al próximo 15 de diciembre, cuando se comunique el dato definitivo de IPC de noviembre. No obstante, teniendo en cuenta los datos del mes de octubre ya se observan incrementos importantes.

El aceite de oliva acumula una subida del 25,4% en lo que va de año, la carne de ovino se encarece un 6% y la de aves casi un 3%. El pescado fresco se abarata un 3,2% en lo que va de año, pero el marisco sube de precio un 2,6% en el acumulado. Los huevos fueron en octubre un 4,5% más caros y la fruta un 13,6%.

Teniendo en cuenta los datos de octubre, se evidencian diferencias entre provincias y comunidades autónomos. El IPC subió un 6,5% en Castilla - La Mancha, frente al 5,4% nacional, siendo la región con más aumento. En el lado contrario, en Canarias fue del 4,2%.