Vodafone prevé que para 2030 existan dispositivos inteligentes 'ponibles' o 'wearables' conectados al cerebro, que interactuarán con los pensamientos de los usuarios, según un informe que ha presentado este miércoles. El estudio, publicado por la tecnológica en colaboración con The Future Laboratory, predice que la innovación en la atención conectada, las ciudades y el transporte inteligente, la conectividad ética y la tecnología del futuro serán fundamentales en 2030.

Según Vodafone, los dispositivos 'wearables' interactuarán con los pensamientos del usuario, al detectar las señales que el cerebro envía automáticamente a la boca cuando los humanos quieren hablar. Esto permitirá a los usuarios dar órdenes a sus asistentes inteligentes sin tener que hablar en voz alta, lo que abre la posibilidad "de un futuro sin pantallas o un metaverso en el que la comunicación con los dispositivos se produce a través de redes neuronales".

Asimismo, el informe predice que en una década los hogares estarán equipados con productos que monitorizarán la salud y podrán diagnosticar afecciones. Así, en 2030 los espejos del baño podrían estar equipados con sensores que comprueben el flujo sanguíneo o el color de piel y los altavoces inteligentes solicitarían recetas al detectar sonidos como la tos.

Con respecto a la movilidad, los vehículos autónomos utilizarán hologramas y la inteligencia artificial (IA) para crear espacios de venta en el coche, con lo que las marcas mostrarán a los pasajeros las últimas colecciones mientras viajan. El informe también predice que los datos personales se convertirán en una nueva forma de moneda que las marcas tendrán que pagar u ofrecer a cambio de una experiencia elevada.

Por último, Vodafone asegura que se desarrollarán herramientas que ayuden a los consumidores a tomar decisiones más conscientes, lo que contribuirá a reducir las emisiones globales hasta en un tercio.