Carlos San Juan, el hombre de 78 años que reclama un "trato más humano" por parte de los bancos, ha realizado este 8 de febrero la entrega simbólica de las 600.000 firmas recogidas en la campaña 'Soy mayor, no idiota', un acto en el que ha agradecido la respuesta que ha obtenido por parte de la sociedad pero en el que ha pedido a los bancos y a los políticos "medidas urgentes" y no "invitaciones" llenas de "paternalismo".

"Esto va a ser una tarea dura", ha reconocido, en declaraciones recogidas por Europa Press, a la entrada del Ministerio de Economía antes de registrar las firmas y reunirse con el secretario general del Tesoro, Carlos Cuerpo.

Carlos San Juan ha tildado esta como "un día para dar las gracias", pero también de "seguir pidiendo" porque, ha recordado, "muchas causas mueren por el cansancio del que las maneja".

No obstante, ha asegurado que él no se cansará, pero ha demandado a los medios seguir "siendo noticiable" y tratar esta problemática con "empatía" y "humanidad", así como ha instado a la sociedad a seguir firmando: "Si llegamos al millón muy bien, y si llegamos a los dos millones mejor".

La sorpresa de Calviño

Frente al ministerio, la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, ha prometido a Carlos San Juan para final de este mes un plan de "medidas eficaces" frente a esta problemática.

"Esta es la aproximación que tenemos (de conclusión del plan) y vamos a hacer todo lo posible por resolver esto", ha aseverado la ministra de Asuntos Económicos ante la sorpresa de Carlos, que no esperaba ser atendido por ella.

Ante el compromiso de Calviño, el promotor de la campaña ha manifestado sentirse "contento". "Se ha conseguido lo que pretendía. El tema estaba muy difuso, pero ahora tengo la inmensa suerte de que hay un compromiso", ha aplaudido tras despedirse de la vicepresidenta primera.

Entre las medidas que debe recoger el mencionado plan, Carlos ha apuntado a una atención presencial en las sucursales "toda la mañana y sin limitación de horario", o que, en caso de que se requiera cita previa, se pueda solicitar esta por teléfono.

También ha reclamado que el personal salga a ayudar a las personas con problemas en los cajeros y que, en todo ello, se "deslinde" lo planteado en el mundo rural y el urbano, ya que tienen distinta "complejidad".