Al Fondo Monetario Internacional (FMI) le sigue preocupando la sostenibilidad del sistema de pensiones español. Una vez más, los directores del organismo con sede en Washington han subrayado en su último informe "la importancia de asegurar la viabilidad" de las pensiones del país.

También han insistido a España en que debe reducir su deuda pública para que el país pueda estar preparado para futuras crisis, en caso de que se produzcan. En esa línea, pide "reconstruir el espacio fiscal". Aunque ahora mismo cree que la política fiscal debe seguir apoyando la economía, cada vez más enfocada hacia los vulnerables, eso es solo a corto plazo.

Más allá, el país debe formular "un plan creíble de consolidación fiscal" que pueda "ayudar a generar el consenso social necesario y respaldar la confianza de los inversores". El informe no menciona la reforma fiscal que el Gobierno está preparando y que debe entrar en vigor en 2023.

Ahora mismo, el FMI espera que España logre reducir este año su déficit presupuestario al 5,3% del PIB (desde el 7,8% del año pasado), y que siga disminuyendo hasta alcanzar el 4,3% el año próximo. Sin embargo, el déficit no baja del 4% en todo el horizonte de las previsiones, que llegan hasta 2027.

Por otro lado, en estas conclusiones de las consultas con España del 'Artículo IV' de 2021, el FMI ha aplaudido la reforma del laboral que acaba de aprobar España, de la que destaca su elevado grado de respaldo derivado del diálogo con los agentes sociales. Recalca que busca abordar las deficiencias del mercado de trabajo, haciendo más atractivos los contratos indefinidos y que equilibra una mayor protección para los trabajadores y la flexibilidad para las empresas.

"Los directores han destacado la importancia de fortalecer la educación y las políticas activas de empleo para facilitar la mejora en la formación de los trabajadores y la reubicación en otros sectores. Consideran que el impacto de esta reforma, también en las finanzas públicas, debe ser estudiado de cerca y ven importante hacer los contratos indefinidos más atractivos para las empresas", reza.

Sus proyecciones apuntan a que la tasa de paro bajará este año al 14% (desde el 15% de 2021), para seguir disminuyendo los próximos años hasta situarse en el 13% en 2026. Echando la vista atrás, el organismo celebra que el empleo se haya recuperado con fuerza y ya supere los niveles anteriores a la crisis.

Mantiene sus previsiones macro

El FMI ha mantenido sin cambios las últimas previsiones macroeconómicas para el país, que se publicaron a finales de enero, con un crecimiento del PIB en 2022 del 5,8%, que se moderará al 3,8% el próximo año y al 2,3% en 2024. En este sentido, reitera su confianza en que la variante ómicron tenga solo un impacto moderado en la actividad económica, mientras que la recuperación de la economía española se verá respaldada por un robusto consumo privado, el impulso de la inversión pública financiada en parte por los fondos europeos y una normalización gradual de los flujos de turismo internacional.

Asimismo, el organismo ve probable que la inflación en España se mantenga elevada a principios de 2022 debido a los altos precios de la energía y las interrupciones en la cadena de suministro, pero confía en que se modere en la segunda mitad del año a medida que estos factores se disipen.

De hecho, las previsiones del FMI apuntan a que la tasa media de inflación, que en 2021 alcanzó el 3,1%, suba este año al 3,5%, para bajar al 1,2% de media en 2023 y al 1,6% un año después. Aun así, insiste en que la incertidumbre sigue muy presente.

"El panorama es altamente incierto y dependerá de la evolución de la pandemia y la persistencia de cuellos de botella en el suministro global", advierte el FMI, subrayando que el ritmo de absorción y la eficacia del uso de los fondos europeos también afectarán el crecimiento de España en los próximos años.

En este sentido, el directorio del FMI considera que el apoyo a la economía debe seguir siendo flexible hasta que la recuperación esté ampliamente afianzada, añadiendo que se necesitan políticas prudentes a mediano plazo para respaldar la estabilidad macrofinanciera y promover un crecimiento sostenible, más verde e inclusivo.

Por otro lado, los directores acogieron con beneplácito los ambiciosos objetivos de mitigación climática recientemente adoptados en España, destacando el aumento gradual y predecible del precio del carbono, al tiempo que se protege a los hogares vulnerables.

Asimismo, "elogiaron la reforma estructural integral y la agenda de inversión de las autoridades", señalando que los fondos Next Generation EU (NGEU) brindan una oportunidad excepcional para apoyar la recuperación al tiempo que promueven una transición hacia una economía más productiva, inclusiva, ecológica y digital. A este respecto, destacaron la importancia de establecer un marco para garantizar un uso transparente y eficiente de los fondos de inversión.