La dirección de ACS va a proponer a la próxima Junta General de accionistas de mayo elevar hasta casi los 2 euros el dividendo por acción de la compañía, así como el nombramiento de un nuevo consejero delegado.

En una conferencia para analistas, el presidente del grupo, Florentino Pérez, ha comunicado que la próxima política de dividendos, "gracias a la venta" de la actividad industrial por un valor total de 5.580 millones y la capacidad de inversión, será "estable", cercana a los 2 euros por título y mantenida en años posteriores.

Acerca del relevo en la cúpula directiva, el presidente no ha desvelado la identidad del que será nuevo consejero delegado, tras la destitución de Marcelino Fernández Verdes el pasado 31 de marzo. Fuentes del mercado consultadas por Efe apuntan a que ese cargo podría ser ocupado por Juan Santamaría, presidente ejecutivo y consejero delegado de la filial Cimic.

Un día después de la presentación de los resultados de la compañía en 2021, con un beneficio neto récord (3.045 millones), Pérez ha recordado que el grupo va a invertir entre 4.000 y 5.000 millones en infraestructuras "y a poder ser en temas de concesiones", ha precisado.

Foco en las autopistas

El presidente del grupo ha adelantado el propósito cercano de la adquisición de concesiones de autopistas en mercados estratégicos, y ha señalado a España, Norteamérica, Europa y Australia como objetivos más destacados. "Próximamente habrá noticias de operaciones nuevas que se van a concretar", ha avanzado Pérez, quien ha apuntado que para la Junta estas decisiones estarán "más elaboradas".

La citada venta de la actividad industrial del grupo pondrá "mayor énfasis" en la adquisición de concesiones de autopistas, ha insistido el directivo, quien ha asegurado que están trabajando en qué proyectos van a invertir "con especial interés" en las autopistas de Estados Unidos.

El presidente del grupo ha destacado la "importante transformación estratégica" que acomete la compañía tras la venta de la actividad industrial y la creación de una empresa de activos renovables, Zero-e, que ACS podría colocar en el mercado en este semestre, según fuentes del mercado.

ACS va a "continuar simplificando" su estructura corporativa y las inversiones. En ese sentido, Cimic se ha incorporado totalmente a la organización, ha dicho Pérez, por un precio de 22 dólares australianos por acción, lo que ha calificado como "una primera medida para simplificar" la citada estructura y que coticen en bolsa dos empresas en vez de tres.

Sobre cómo se va a financiar el resto de la operación sobre Cimic, el presidente de la multinacional ha comentado que se ejecutará de diversas maneras, con fórmulas híbridas, con créditos o con la venta de algún activo. Ha reiterado que estas operaciones van a permitir al grupo una reorganización en una parte de concesiones y en otra de construcción.

Llegan 1.070 millones del Gobierno

En relación con el pago a Abertis (filial de ACS concesiones) que ha aprobado el Gobierno (18 de febrero pasado) de 1.070 millones, Pérez ha señalado que espera que ese abono se materialicé el próximo mes de marzo.

ACS en su plan sostenibilidad 2025, que incluye la pretensión de alcanzar la neutralidad climática en 2045, se ha comprometido a una reducción de gases de efecto invernadero en un 15 % para 2025 en sus actividades de infraestructuras, que podrá llegar al 30 %.

Acerca de los 479 millones provisionados para riesgos, la dirección de ACS ha apuntado que, de esa cantidad, 300 millones s destinará a riesgos de capital circulante y a litigios pendientes, en tanto que 179 millones se dedicarán a una provisión de un activo en Nevada (Estados Unidos) pues la potencia instalada en esa planta es inferior a la diseñada.

La compañía espera que el total de la cantidad destinada a provisiones no suponga una salida de caja. Pérez ha calificado los objetivos de la compañía como "ambiciosos para este año" y ha opinado que permitirán al grupo "mantener el dividendo, seguir creciendo y simplificar el grupo".