El Gobierno presentó ayer la batería de medidas con las que confía en paliar el impacto en la economía y las empresas que está teniendo la invasión de Ucrania por parte de Rusia. El real decreto abarca acciones desde bonificaciones en los combustibles hasta limitaciones a la subida del alquiler o la prohibición de despedir. Un amplio listado en busca del rescate de la economía que incorpora acciones sobre una buena parte de los sectores económicos del país. Casi a la misma hora, en Euskadi las tres diputaciones presentaban su particular plan de rescate.
La foralidad vasca da margen a las tres autoridades tributarias para implementar beneficios a las empresas y ayer se aplicó en busca de dotar de mayor liquidez a las empresas más afectadas por el actual contexto económico. Las medidas se estima que estén en vigor la próxima semana. En su conjunto tendrán un valor estimado de 165 millones de euros. La situación comenzaba a ser insostenible para muchas empresas por el precio disparado de la energía y por los problemas de suministro.
Así, Bizkaia, Gipuzkoa y Álava han acordado que las empresas implantadas en alguno de los tres territorios vascos podrán acogerse a aplazamientos y exenciones de sus obligaciones tributarias en los impuestos de gestión foral. Así, las tres diputaciones han pactado que las empresas y autónomos podrán retrasar el pago de impuestos como el de Sociedades o el IRPF. Serán aplazamientos en el pago, con hasta tres meses de carencia y el pago en seis cuotas mensuales de igual importe.
De este modo, las empresas, pymes y autónomos del País Vasco se podrán acoger, además de las medidas y bonificaciones anunciadas ayer por el Ejecutivo de Sánchez, a las previstas en el plan pactado por las tres Diputaciones vascas. El objetivo es contribuir a fortalecer la liquidez de las empresas y sectores más expuestos al contexto de elevada inflación y al incremento de los costes de energías y materias primas. Las medidas están orientadas a pequeñas empresas, microempresa y autónomos.
Ayudas al sector primario
Los aplazamientos en el pago de impuestos se concederán sin necesidad de garantías y sin que supongan ningún tipo de interés de demora. También se permitirá la exención en el abono de los pagos fraccionados de IRPF o el incremento del ‘forfait’ de gastos. Junto a ello, se ha aprobado una batería de subvenciones para el sector primario, uno de los más afectados. En los próximos días, por la vía de urgencia, se aprobarán los correspondientes decretos forales normativos para incorporar todas estas medidas.
En cuanto a las subvenciones anunciadas, se trata de una partida de 5,4 millones de euros a repartir entre los tres territorios. Álava se llevará casi la mitad, 2,5 millones, al ser la provincia en la que el sector primario tiene más peso. Gipuzkoa recibirá 1,7 millones y Bizkaia 1,2 millones.
Los responsables forales Unai Rementeria, Markel Olano y Ramiro González subrayan la relevancia del acuerdo que ha permitido a las tres instituciones forales hacer uso de sus competencias para adoptar decisiones en un ámbito de su competencia, el tributario.
La ayuda a las pequeñas empresas llega sólo una semana después de que el Gobierno vasco reconociera la gravedad de la situación económica. El Ejecutivo de Iñigo Urkullu ha rebajado de modo importante sus previsiones de crecimiento para este año y el próximo y ha activado medidas de financiación a las empresas afectadas por la invasión de Rusia en Ucrania.
Freno al crecimiento
El Ejecutivo vasco reconoce ya que la situación generada con la invasión por parte del Ejército ruso «ha trastocado totalmente el escenario». El propio lehendakari aseguró que Euskadi debía sumergirse en una suerte de ‘economía de guerra’. Así, de la estimación que a finales del año pasado de un crecimiento del 6,7% para este año, ahora se rebaja la previsión de crecimiento a un 4,5%. Para el próximo año también se recorta a un 4,1%.
Se trata de una revisión a la baja importante de 2,2% en el crecimiento que se preveía en diciembre pasado y que ahora se recorta de forma importante. En cuanto a la creación de empleo, el cuadro macroeconómico que dibuja el Ejecutivo vasco sitúa la tasa de paro en el País Vasco en el 9,5%, ligeramente superior al 9,2% estimado anteriormente. Supondría una creación de alrededor de 16.600 empleos a lo largo de este año.
En esta situación, el Gobierno vasco ha activado una línea de crédito con las empresas más afectadas por la actual situación en Ucrania y su entorno. A través del Instituto Vasco de Finanzas y ELKARGI SGR ha previsto una primera línea de crédito de 10 millones de euros, ampliables, dirigido al apoyo a empresas que tienen relación comercial directa con Rusia, Ucrania o Bielorrusia.
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