Las entidades financieras tanto de España como de la zona euro esperan una contracción en los préstamos bancarios en el próximo trimestre, tal y como ha constatado el Banco de España en el artículo de la Encuesta sobre Préstamos Bancarios. Esta contracción generalizada de la oferta de crédito se producirá, probablemente, como reflejo de la elevada incertidumbre sobre cómo puede afectar la guerra en Ucrania al riesgo crediticio y por las expectativas de una política monetaria menos acomodaticia.

Por lo que respecta a la demanda, las entidades financieras españolas anticipan una disminución generalizada, mientras que las de la zona euro creen que las solicitudes provenientes de las empresas seguirán aumentando, las de los hogares para consumo y otros fines se mantendrán sin variaciones, y descenderán las de las familias para adquisición de vivienda.

En España, las entidades encuestadas anticipan un nuevo endurecimiento de los criterios de concesión y un leve descenso de la demanda en el segmento de financiación a empresas, ante el aumento de la incertidumbre asociado al impacto que la guerra en Ucrania podría provocar sobre la actividad económica.

Respecto al crédito para la financiación de vivienda, las entidades financieras españolas prevén también un cierto endurecimiento de los criterios de concesión de préstamos y una caída de la demanda, interrumpiendo la tendencia ascendente de los cuatro últimos trimestres.

También vaticinan un ligero endurecimiento de los criterios de concesión de préstamos al consumo y un leve descenso de la demanda en este segmento en el segundo trimestre del año.

Primer trimestre, endurecimiento de la concesión de crédito

Asimismo, la encuesta muestra que, en el primer trimestre de 2022, tanto en España como en la zona euro los criterios de concesión de préstamos a las empresas se habrían endurecido, en un contexto de mayor incertidumbre, problemas de abastecimiento de algunos productos y aumento de los costes energéticos y de otras materias primas. Los principales determinantes de esta evolución fueron la mayor percepción del riesgo y la menor tolerancia a este por parte de los intermediarios financieros, tal y como se refleja en el informe del organismo.

En España, los criterios de concesión se endurecieron más intensamente en las pymes que en las empresas más grandes. En esta línea, aumentó ligeramente el porcentaje de solicitudes de fondos denegadas.

En cuanto a los préstamos a hogares, los criterios de concesión de crédito se mantuvieron estables en España entre enero y marzo, tanto en los préstamos para la adquisición de vivienda como en el crédito al consumo, mientras que en la zona euro los criterios de concesión fueron estables en los préstamos para adquisición de vivienda y registraron una cierta relajación en la financiación para consumo.

En los préstamos concedidos, en España las condiciones aplicadas a los créditos para la adquisición de vivienda se relajaron "algo" por la fuerte competencia en este segmento, mientras que en la eurozona se suavizaron las condiciones de los préstamos al consumo para las familias y se endurecieron las del segmento de financiación a las empresas y las de los créditos a hogares para adquisición de vivienda.

La demanda de crédito siguió aumentando moderadamente en las dos áreas por la mayor confianza de los consumidores, de forma casi generalizada por segmentos, durante el primer trimestre del año, lo que revela que la creciente incertidumbre que se puso de manifiesto en marzo con el estallido de la guerra en Ucrania no había afectado aún de forma significativa a las solicitudes de fondos.