Es el combustible que requieren los trenes que circulan a diario por toda la red ferroviaria de nuestro país. El gasóleo B que impulsa la red ferroviaria, exento de impuesto especiales, ha salido a licitación. El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, a través de Adif, ha licitado el contrato de suministro para los dos próximos años, y uno prorrogable, por un importe total de 131 millones de euros. En el contrato también se ha incluido el gasóleo B a tipo reducido destinado al uso en grúas portacontenedores y otros motores y vehículos ferroviarios.

Una vez adjudicado el contrato se activará del 1 de diciembre de 2022 hasta el 30 de noviembre de 2024 y se contempla una prórroga por otros 12 meses, por un valor estimado final, -incluyendo esta prórroga-, de 131 millones de euros.

Evidentemente el consumo del gasóleo B exento durante 24 meses es muy superior, cien veces más que el bonificado. En el primer caso el contrato estima en 143,76 millones de litros el consumo y en 1,42 millones el gasóleo bonificado.

Cuatro áreas de suministro

Los puntos de aprovisionamiento de carburante han sido agrupados en cuatro lotes o áreas de gestión, de modo que el área 1 corresponde a las comunidades autónomas de Madrid y Castilla-La Mancha; el área 2 a Extremadura y Andalucía; el área 3 a la Región de Murcia, Comunidad Valenciana, Aragón y Cataluña, y el área 4 corresponde a Cantabria, Castilla y León, Navarra, País Vasco, La Rioja, Asturias y Galicia.

Los licitadores podrán presentar oferta para uno, varios o todos los lotes, presentándose para cada uno una oferta diferencial única para los puntos de suministro fijo y móvil del lote, y una segunda con dos diferenciales, uno para los puntos fijos y otro para los puntos móviles del lote.

Los diferenciales en euros por metro cúbico ofertados por los licitadores incluirán todos los costes de logística y distribución, para situar el producto en los depósitos de Adif y en los vehículos ferroviarios.