El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha respondido a las críticas del sector energético y bancario sobre el impuesto y ha asegurado que si están protestando es porque van por el buen camino. Sánchez ha arremetido directamente contra los presidentes del Banco Santander y de Iberdrola, Ana Botín e Ignacio Sánchez Galán.

"He escuchado a la señora Botín y al señor Galán... si protestan es que vamos en la buena dirección", ha apuntado en su balance del curso político. Y ha añadido que "son los mismos que dijeron que subiendo el SMI y con esta reforma laboral se iba a caer España".

Según las palabras de Sánchez, los que criticaban la reforma laboral se creían que se iba a crear desempleo y que se iba a expulsar a muchos trabajadores del mercado laboral. "Ha sucedido todo lo contrario, por lo tanto, creo que vamos en buena dirección", ha insistido el presidente.

Según la proposición de ley que presentaron este jueves en el Congreso las formaciones gubernamentales, el Ejecutivo propone gravar temporalmente con un tipo del 4,8% los intereses y las comisiones netas de las entidades financieras con ingresos superiores a los 800 millones de euros, y con un tipo del 1,2% las ventas totales de las energéticas que facturen más de 1.000 millones de euros al año, así como una sanción para aquellas compañías que trasladen el impuesto a los usuarios.

Por otro lado, Sánchez también se ha referido a unas "declaraciones bastante desafortunadas" del presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, citando al dramaturgo Bertolt Brecht para oponerse a estos dos nuevos impuestos.

"Primero los judíos, luego fueron los comunistas y luego me tocó a mi", parafraseó Garamendi al dramaturgo, criticando los gravamen a la banca y a las energéticas. Ante esto, Sánchez ha pronunciado que "el sufrimiento de muchos conciudadanos de clase media trabajadora que están sufriendo el recorte de su bolsillo no puede ser la alegría de unos pocos".