Las agencias de viajes por fin comienzan a ver la luz al final del túnel. Los actores del sector turístico que más tarde iban a salir de la crisis provocada por el covid firmaron un mes de junio por encima de las cifras de negocio de 2019.

Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) publicados esta semana reflejan una mejoría de las ventas de minoristas y turoperadores de más de un 31% respecto al mes de mayo; de un 251% respecto a junio de 2021; y de un 2,34% frente a los niveles del mismo mes de 2019.

Pese a que una gran mayoría de las agencias de viajes consultadas hace unos meses por la Asociación Corporativa de Agencias de Viajes Especializadas (ACAVE) no creía posible superar las cifras prepandemia, finalmente las expectativas han sido superadas por las ganas de viajar.

En cuanto al empleo, el sector turístico en su conjunto sigue siendo el principal motor de la recuperación en España, suponiendo el 13,3% del total de afiliados. En el caso concreto de las agencias de viajes, en el mes de julio se incrementaron en 5.203 los trabajadores. 

La cifra total de afiliación es de 61.116, de los que 43.281 son asalariados y 17.835, autónomos. La cifra se queda un 5,19% por debajo de los 64.288 afiliados con que se cerró el año 2019, el último antes de la llegada del coronavirus.

En cuanto a los trabajadores afectados por Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), en el mes de julio apenas quedaban 2.000 personas, de las que más de la mitad se veían afectadas por suspensiones parciales de su jornada de trabajo. Además, la gran mayoría responde al Mecanismo Red diseñado para este tipo de negocios.

El conjunto del sector turístico cerró julio con 2.702.645 afiliados a la Seguridad Social, lo que supone una subida del 5,6% interanual y la creación de 143.524 nuevos empleos, según los datos hechos públicos por el organismo Turespaña.

La clave está ahora en saber si el actual contexto de inflación va a retraer o no la demanda en el sector turístico y hasta qué punto la recuperación del empleo y la facturación puede ser sostenida en el tiempo.