Bankinter ha sido la entidad que ha dado comienzo a los resultados empresariales de 2022 de los bancos. La entidad ha obtenido un beneficio récord que supera el objetivo que tenían para este año. María Dolores Dancausa, consejera delegada de Bankinter, se muestra optimista con la evolución del banco en este 2023, a pesar de que se empieza a pagar el impuesto “confiscatorio” de la banca anunciado por Pedro Sánchez.
“Yo no creo que el impuesto vaya a ser un freno para los resultados récord que estamos consiguiendo, a ver va a suponer un golpe porque es una cantidad muy relevante”, ha señalado Dancausa en la rueda de prensa de los resultados. Pero, ha añadido, que 2023 seguirá siendo un buen año para Bankinter porque espera una actividad extraordinaria. No obstante, ha incidido en que el tema a debatir con el impuesto no es que la banca gane más o menos, sino que es “un impuesto injusto, arbitrario y confiscatorio”. Además, ha puntualizado que "este impuesto no tendrían que ponerlo porque además dicen que la economía española va bien".
La consejera delegada ha recordado que la banca “paga muchos más impuestos que otros sectores”, por lo que ha incidido en que “no hay ninguna razón objetiva” que justifique esta decisión. Por lo que respecta a las razones que dan desde el Gobierno para justificar este impuesto es el de “arrimar el hombro” ante la situación económica. Ante ello, Dancausa ha explicado que todo impuesto, norma o ley “debe dejar de lado los asuntos emocionales” y ha puntualizado que hay que ser justos.
“Estoy totalmente de acuerdo en que hay que proteger a la sociedad, pero el mecanismo para conseguirlo (a través del impuesto) es erróneo”, ha apuntado la consejera delegada que ha vuelto a afirmar que este impuesto se recurrirá al día siguiente de pagarlo.
Bankinter espera tener que abonar a las arcas públicas de España entre 80 y 100 millones de euros en concepto del impuesto, según las estimaciones que maneja la entidad y que ha difundido este jueves. "Estamos estimando para 2023 y 2024, porque esperamos que sea un impuesto para esos dos años, una horquilla de entre 80 y 100 millones de euros", ha explicado el director financiero de Bankinter, Jacobo Díaz en una conferencia telemática con analistas.
El directivo ha confirmado que las provisiones para abonar el impuesto se registrarán en la cuenta de resultados del primer trimestre de 2023 y se incorporará al concepto de costes regulatorios, donde la entidad contabiliza las contribuciones al Fondo Único de Resolución o al Fondo de Garantía de Depósitos.
De cara a 2023, el director financiero de la entidad ha estimado que el margen de intereses (los ingresos que obtiene el banco por el cobro de intereses) registrará un crecimiento similar al observado en 2022, de cerca del 20%.
Díaz ha señalado que aunque el escenario por venir tiene "incertidumbre", Bankinter es optimista sobre el margen de intereses para 2023 por dos motivos. Por un lado, en torno al 70% de su cartera hipotecaria está indexada a tipos de interés variables. Por otro lado, las previsiones macroeconómicas que maneja el banco es que la tasa de paro siga bajando, y este es el indicador macro más importante para la firma.
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