El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha rebajado este jueves una décima su previsión de crecimiento de la economía española para 2023 hasta el 1,1%, frente al 1,2% que estimaba en octubre. A la vez, mejora el avance del producto interior bruto (PIB) español para el próximo año, 2024, hasta el 2,4%, frente al 2,1% que pronosticaba hace tres meses.

En cambio, el Fondo estima que en 2022 la economía española creció un 5,2%, seis décimas más que en su anterior previsión. Los datos oficiales de avance de PIB en 2022 aún están por publicarse, lo hará el INE el próximo viernes 27 de enero, pero si esta cifra resultase acertada superaría a la prevista por el propio Gobierno, que apuntaba a un avance del 5,2%.

"La economía española se ha mantenido resiliente a pesar del viento de cara que han provocado las consecuencias de la invasión rusa a Ucrania. El fuerte rebote del turismo y de otros servicios han impulsado el crecimiento este año. El empleo ha sobrepasado los niveles prepandemia. Sin embargo, los fuertes precios de la energía a nivel internacional y de los alimentos, el debilitamiento de sus socios comerciales, el deterioro de la confianza del consumidor y de las empresas y las subidas de tipos de interés han ralentizado la recuperación", explica el organismo con sede en Washington en una actualización de su llamado Artículo IV.

En este contexto, ahora el FMI espera que el crecimiento se modere sobre todo por "los efectos de los altos precios de la energía y de los alimentos, las peores condiciones de financiación, y la más débil demanda externa". Además, espera que en 2024 el PIB recupere su nivel prepandemia.

La inflación se relajará hasta el 3,7%

En cuanto a la inflación media de este año, el FMI espera que se sitúe en el 3,7%, 1,2 puntos menos (en octubre estimaba que los precios este año se situarían en el 4,9% de media), y que disminuya hasta el 2,7% en 2024. "La inflación se espera que continúe moderándose gradualmente en 2023, reflejando la fuerte base de 2022, la reducción de los cuellos de botella de suministro, y la normalización de los precios de los combustibles fósiles", resalta el organismo.

El paro, en cambio, espera que se mantenga estable pese a los fuertes precios, al mismo nivel que este año, en el 12,8%, para reducirse hasta el 12,5% en 2024 y al 12,3% en 2025. Del lado de la deuda pública, estima que será en 2023 el 112,1% del PIB, tras cerrar 2022 en el 112,8%, para bajar al 110% el año que viene y hasta el 109% un año después.

Sin embargo, los directores ejecutivos del FMI advierten, una vez más, que estas previsiones están sujetas a la incertidumbre, tanto por la guerra en Ucrania como por las condiciones financieras y los precios. Por ello, recomiendan implementar políticas económicas flexibles y calibradas con cuidado, e implementar reformas que apoyen el crecimiento sostenible e inclusivo.