2022, el primer año de la reforma laboral, terminó con la creación de empleo más débil de los últimos ocho años (2013) y con un ligero repunte del paro en los meses finales del ejercicio, pero aún así consiguiendo reducir la tasa a su nivel más bajo visto en un final de año desde 2008. Según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) que ha publicado este jueves el Instituto Nacional de Estadística (INE), las personas con un puesto de trabajo aumentaron en 278.900, mientras que el paro quedó en el 12,9%.
El número de personas con un puesto de trabajo ha alcanzado los 20,46 millones, nivel que solo se ha superado en el país en 2007, en plena burbuja inmobiliaria. Así, los datos confirman la recuperación del mercado de trabajo de la crisis del coronavirus, aunque este año haya avanzado a un ritmo más lento que el pasado, cuando se registró una creación de empleo récord (+840.000 puestos de trabajo).
Al cierre del año había 497.000 ocupados más que a finales de 2019, cuando aún no había estallado la pandemia. En contraposición, el PIB, y por tanto los niveles de renta per cápita de la población, no ha vuelto a los niveles de entonces según los últimos datos disponibles. Este viernes, el INE dará a conocer los datos preliminares de PIB del cuarto trimestre de 2022.
A lo largo de este año, la EPA ha mostrado una fuerte mejoría de los españoles con un empleo, que no llegaban a los 20,1 millones en el primer trimestre, pero ascendieron hasta los 20,47 millones en el segundo y terminaron el tercero en los 20,55 millones. Sin embargo, en el cuarto trimestre esta recuperación se decayó y los trabajadores descendieron hasta los 20,46 millones.
En relación con el año pasado, el empleo ha crecido un 1,38%, mucho más lentamente de lo que lo hacía en verano, cuando lo hacía a un ritmo del 2,57%. Como los economistas preveían, la actividad del país se ralentizó a final de año y previsiblemente sucederá lo mismo durante este primer trimestre de 2023, para terminar el ejercicio con un crecimiento mucho más moderado que el experimentado en 2022, de alrededor del 1,2% frente al 5,2% que se espera haber alcanzado el año pasado.
El paro repunta en el cuarto trimestre
Esa creación de empleo se ha visto reflejada en la tasa de paro, que a pesar del repunte está ahora en niveles nunca vistos en un final de año desde antes de que estallase la crisis financiera, en el último trimestre de 2008. A lo largo de todo este año han salido del desempleo 79.900 personas, llevando el paro al 12,9%.
En total, hay 3.024.000 parados en España, por encima del nivel de los tres millones, pero son 168.000 menos que antes de la pandemia, cuando había 3.191.900. En el último trimestre, los parados subieron en 43.800 personas, un 1,47%, mientras que en años precovid como 2019 en el cuarto trimestre los parados cayeron en 22.500 personas, a un ritmo del 0,7%. Esos tres meses la ocupación también disminuyó, y lo hizo en 81.900 personas (-0,4%).
Un año de la reforma laboral: aumentan indefinidos
Pero sobre todo la reforma laboral anima a prestar atención a la calidad de los contratos. La encuesta del INE revela que el empleo indefinido ha aumentado en 1.591.100 personas, hasta los 14,26 millones y frente a los 12,66 que había en el cuarto trimestre de 2021. A la vez, las personas con un empleo temporal han caído en 1.193.800, hasta los 3,11 millones (había 4.308.500 hace un año), lo que lleva la tasa de temporalidad a su nivel más bajo de toda la historia: el 17,9% de los trabajadores tienen ahora un contrato temporal, frente a los indefinidos.
De la misma manera ha disminuido el número de trabajadores por cuenta propia, al bajar en 111.200 personas en el conjunto del año.
La creación de empleo indefinido no ha ido en detrimento de las jornadas completas, según esta encuesta que se realiza a los españoles, ya que ha aumentado el número de contratos a tiempo completo y también a tiempo parcial. Este cuarto trimestre de 2022 son 235.000 más las personas que cuentan con un contrato a jornada completa, un 1,35% más que en 2021, y 43.700 más las que tienen uno a tiempo parcial, un 1,6% más.
Asimismo, la mayor parte de esa creación de empleo se concentró en el sector privado, con la creación de 228.200 empleos (+1,4%), frente a los 50.700 que se crearon en el sector público (+1,4%). Por sexos, el empleo creció algo más entre los hombres, con 146.800 ocupados más (+1,3%), frente a las 132.100 trabajadoras más que se sumaron al mercado de trabajo (+1,4%). En el lado del paro, descendió más entre los hombres (-47.200 desempleados) que entre las mujeres (-32.600 desempleadas).
La tasa de paro juvenil también se redujo, en este caso hasta el 29,2%, frente a la del 30,7% de finales del año anterior. También descendió en el cuarto trimestre frente al tercero, cuando se situó en el 31%. Por regiones, el empleo creció en 14 comunidades autónomas, todas salvo Asturias, Aragón, País Vasco y la ciudad autónoma de Melilla.
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