España ha duplicado en un año su factura energética con el exterior por la subida de precios del gas y el petróleo derivada de la guerra de Ucrania. En su conjunto, el saldo comercial entre enero y diciembre registró un déficit de 68.112 millones de euros frente a los 26.178 millones del año anterior. De ello, el 77,3% corresponde al déficit energético, que se elevó hasta los 52.617 millones. Esta cifra supone doblar los 25.3256 millones del ejercicio previo. El saldo no energético arrojó un signo negativo de 15.496 millones frente a los 852 millones del mismo período de 2021.
Así lo reflejan los datos del 'Informe de Comercio Exterior' publicado este jueves por la secretaría de Estado de Comercio. Las exportaciones de bienes crecieron un 23% respecto al mismo período de 2021, hasta alcanzar los 389.209 millones de euros. En volumen, las exportaciones españolas se elevaron un 3,9% interanual y las importaciones, un 7,4%.
Mientras que las exportaciones de productos no energéticos supusieron 350.946,2 millones (18,8% más que en 2021), las importaciones fueron de 366.441,6 millones (23,7% más). Por su parte, las exportaciones de productos energéticos tuvieron un valor de 38.262 millones (80,1% más), mientras que las importaciones alcanzaron los 90.879,5 millones (95,1% más). En volumen, las importaciones de estos últimos crecieron un 23,3% interanual, con una subida de precios del 58,2%.
"El crecimiento en volumen se debe con total probabilidad a la reactivación de la economía y el transporte", explican desde el departamento que dirige Xiana Méndez. La recuperación del sector turístico y la vuelta a la movilidad internacional hizo necesaria la importación de combustibles. Por su parte, la reactivación de la actividad industrial también contribuye al crecimiento y destaca la necesidad de aprovisionamiento. "Ha sido una preocupación de todos que las reservas estuvieran al nivel que se comprometió España dentro de la Unión Europea y eso también se deja sentir", aducen las citadas fuentes.
Superávit energético con Francia: 1.186 millones
En el caso de Francia, en el ámbito energético exportamos 3.313 millones de euros frente a los 1.210 millones de 2021, mientras que la importación alcanzó los 2.127 millones, frente a los 1.679 del año anterior. "A diferencia de 2019 y 2020, donde importábamos más que exportábamos en cantidades no tan significativas, ahora exportamos mucho más de lo que importamos y hay un cambio de signo y un cambio en el volumen muy significativo", explican desde Comercio. El intercambio comercial con el país galo era deficitario en 2021 por 470 millones; en 2020, por 143; y en 2019, por 430. Ahora, hay un superávit de 1.186 millones.
El gasto en gas ruso se triplica
En cuanto a la situación con Rusia, desde marzo y abril las exportaciones cayeron drásticamente, fundamentalmente en bienes de equipo. En mayo y julio se recuperaron, pero a partir de agosto se volvió a intensificar hasta una caída acumulada del año de un 42%. Por su parte, las importaciones crecen un 26% en el global y un 33% si se tienen en cuenta solo los productos energéticos.
En algunos productos se percibe el impacto de las sanciones. Desde mayo se ha dejado de importar crudo y desde agosto se ha dejado de importar carbón. Pero el gasto en gas natural ruso se ha multiplicado por tres respecto a 2021.
Bloqueo de las exportaciones a Argelia
Las exportaciones a Argelia siguen paralizadas desde el pasado mes de junio, como represalia por el cambio de postura de España sobre el Sáhara. La caída en diciembre frente al mismo mes del año anterior es del 93%. El mercado argelino está bloqueado porque no se pueden realizar las domiciliaciones bancarias, algo necesario para la operativa de exportación. Se están llevando a cabo gestiones diplomáticas para intentar desbloquear el problema, pero "no tenemos una previsión de normalización inmediata", reconocen desde Comercio.
Por su parte, las importaciones evolucionan de manera positiva (+59%), con un especial peso de las compras energéticas marcadas por el alza de precios. Dos tercios de lo que se importa es gas y otro tercio es petróleo.
1.000 millones menos de carne a China
Llama especialmente la atención el crecimiento de las importaciones de China, que han ascendido a 50.000 millones de euros, alcanzando un récord histórico. Por contra, las exportaciones caen más de un 7% interanual, fundamentalmente por la reducción de 1.000 millones de euros en la venta de carne de porcino.
En 2020 y 2021, las exportaciones de productos de alimentación se dispararon con tasas de crecimiento de tres dígitos. "Nuestras exportaciones aumentaron mucho por la situación de la cabaña y la necesidad que tuvieron de tirar de la importación y ahora volvemos al nivel de exportación de porcino que teníamos antes de la pandemia", explican desde Comercio. Pese a este efecto del gigante asiático, se han conseguido aumentar las exportaciones de porcino al resto del mundo, en especial a Japón.
Por sectores, las exportaciones de productos químicos representaron el 18,6% del total (+34,6% interanual); los bienes de equipo supusieron el 17,5% del total (+15,7%); la alimentación, bebidas y tabaco, un 16,5% del total (+12,8%); y el sector del automóvil, un 11,5% (+10,6%).
Por subsectores, en exportaciones destacaron petróleo y derivados, debido principalmente a las mayores entregas a Países Bajos, Francia, Estados Unidos y Portugal. También destacan los medicamentos, el carbón y la electricidad y los automóviles. El informe destaca que las exportaciones de productos energéticos aumentaron un 80,1% interanual.
Por su parte, las importaciones de productos energéticos representaron el 19,9% del total y crecieron un 95% interanual. Por subsectores, se aprecia el despunte de las mayores importaciones de petróleo y derivados de Estados Unidos, Brasil, Arabia Saudí y Nigeria. También creció el gas de Estados Unidos y, en menor medida, de Rusia, Nigeria y Egipto.
Por mercados, las exportaciones dirigidas a la Unión Europea supusieron el 62,8% del total y crecieron un 19,4% interanual; las dirigidas a la zona euro representaron un 55,2%, mientras que a destinos extracomunitarios se dirigieron el 37,2% del total.
Según explican desde la secretaría de Estado de Comercio, los problemas de suministro en Europa ya llevan disminuyendo tres meses y el coste de los fletes se ha ido moderando desde finales desde los 11.000 dólares de septiembre de 2021 hasta los 2.000 dólares de febrero de 2023. "Es un indicador que favorece la situación del comercio internacional", explican.
Ahora, sus previsiones indican que las exportaciones de bienes y servicios sigan creciendo en 2023, a un ritmo más alineado con la economía mundial y que se vaya moderando en términos de precio.
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