Los productores y distribuidores se pronuncian una vez más en contra de la propuesta de Yolanda Díaz de implantar topes de precios en base a la Ley del Comercio Minorista para controlar la inflación. El presidente de la organización Aecoc, Ignacio González, aseguró este jueves que "ningún actor de la cadena alimentaria está sacando partido de la subida de costes". "Cuando un supermercado vende un euro, gana al final entre dos y cuatro céntimos. Si tiene una inflación muy fuerte, lógicamente desaparecen", aseveró.

En este sentido, ha dicho que los márgenes de las empresas "se están viendo muy resentidos" y se verá en sus resultados. Precisamente, este mismo jueves el grupo Dia anunciaba sus resultados anuales. En un encuentro con la prensa, sus directivos desvelaban que han reducido dos puntos sus márgenes para no trasladar toda la subida de costes al consumidor final y evitar un incremento aún más fuerte de los precios.

"Nos hemos visto obligados a aplicar una subida de precios para garantizar la supervivencia", ha dicho. "Todo lo que sea ayudar a bajar la cesta de la compra está bien, el problema es quién paga esta fiesta. Si lo va a hacer quien ya lo está sufriendo, es inviable y no tiene recorrido", reflexionó sobre hipotéticos topes de precios.

"Se trata de una Ley que se ha aplicado en algunas ocasiones como para establecer el precio único de las mascarillas, pero el sector alimentario es muy complejo y sinceramente la veo inaplicable", señaló también esta semana el director general de la patronal Asedas (Mercadona, Dia Lidl...), Ignacio García Magarzo.

Desde el sector del gran consumo avalan la rebaja del IVA para productos básicos implantada por el Ejecutivo, pero piden que sea "más ambiciosa" y que incluya la carne y el pescado. Es algo que el Gobierno ha descartado hasta el momento, pese al incremento de recaudación derivado de la inflación.

Si se bajara del 10% al 0%, aseguran desde Aecoc, el impacto en el IPC de alimentación sería de 4 puntos porque pesa mucho en la cesta de los españoles. Y si se baja del 10 al 5%, supondría reducirlo prácticamente dos puntos. "Estas dos categorías suponen, en términos de gasto, el 34% de la cesta de la compra de alimentos de los españoles, por lo que rebajar su IVA podría ser más efectivo que centrase en los productos que pesan menos", sostuvo González durante los Premios Académicos y de Periodismo Aecoc.

Respecto al vaticinio realizado el lunes por el ministro de Agricultura, Luis Planas, de que la inflación de los alimentos ha "tocado techo", desde el gran consumo no las tienen todas consigo y no se atreven a avanzar cuál puede ser el momento en el que los precios se empiecen a moderar.

El titular de Agricultura reunió a principios de semana al Observatorio de la Cadena Alimentaria, un foro en el que están representados todos los agentes relacionados con la alimentación; desde productores hasta distribuidores. Tras más de dos horas de reunión, no salió ninguna medida concreta, salvo la petición de Planas al sector de que traslade a los precios finales la bajada de costes que podría estar empezando a darse.

"Ningún insumo está bajando de precio"

Sin embargo, González insistió este jueves en que si no se toma ninguna medida adicional, "la inflación va a tardar en remitir". "No vemos ningún insumo que esté volviendo a los precios de antes de la crisis. Podrán moderarse las subidas, pero la plataforma de precios sobre la que estamos trabajando sigue siendo más alta que la de 2019", ha explicado.

También se refirió al señalamiento realizado desde las filas de Unidas Podemos. En este sentido, reprochó que el sector del gran consumo ha pasado de ser aplaudido por su buen trabajo durante la pandemia a recibir "acusaciones gravísimas e inadmisibles". La ministra de Derechos Sociales y secretaria general de Podemos se refirió al presidente de Mercadona, Joan Roig, como un "capitalista despiadado".

Antes de que concluyese la reunión del Observatorio de la Cadena el lunes, desde el partido morado aseguraron que no esperaban nada de ese encuentro, porque la solución no es negociar "con quien es parte del problema". "No parece que vaya a ser muy efectivo pedirles por favor a los empresarios de la gran distribución que bajen los precios. Son los que han aprovechado la crisis económica para hacerse de oro. Necesitamos intervenir ya la cesta de la compra, tope o bonificación. No hay más opción", agregó Belarra al término de la reunión.

Unidas Podemos plantea una bonificación del 14,4 % sobre el precio de una cesta básica de alimentos, para abaratarla hasta niveles prepandemia. Al igual que se hizo con los carburantes, se trataría de aplicar a una cesta básica de la compra -leche, aceite, huevos, carne, pescado, frutas o pan- una bonificación que se haría efectiva al pagar en caja y que aparecería reflejada en el tique.

González, por su parte, recordó que el sector de la distribución en España es altamente competitivo, donde el precio es una clave de decisión de la tienda. "Gracias a que tenemos muchas cadenas regionales, cambiar de tienda es algo que se puede hacer", señaló. "Esto no es un mercado monopolístico ni un oligopolio y la mejor manera de bajar la inflación siempre va a ser favorecer la libre competencia", remató.