En los próximos días, se conocerán quiénes participarán en el proyecto importante de interés común europeo (IPCEI) de microelectrónica. Una suerte de proyecto estratégico paneuropeo del que España quiere formar parte. En Ametic, la patronal que agrupa a las empresas del sector industrial digital creen que este será el primer paso antes de que el Gobierno tenga listas las convocatorias del PERTE más ambicioso -al menos, en presupuesto- del Plan de Recuperación.

Pero mientras se materializan los proyectos europeos y españoles para la fabricación y el diseño de microchips, el sector ya estudia cómo afrontar el gran reto: formar a expertos en semiconductores que puedan trabajar en las iniciativas que financie el Plan de Recuperación. Desde Ametic creen que se deberían formar al menos a 600 profesionales cada año para cubrir la demanda nacional de la industria.

Pedro Mier, presidente de Ametic, cree que "el cuello de botella más importante, no solo para España, también para Estados Unidos y otros países" va a ser la disponibilidad de técnicos y profesionales de la microelectrónica". Por ello, la asociación empresarial ha presentado una propuesta para establecer una estrategia de formación, a la que ya se han adherido 22 universidades.

Encontrar talento cualificado ya es un problema para las empresas del sector, que puede agravarse si se intensifica la actividad del mismo. Según el Mapeo del Ecosistema Español de Microelectrónica, presentado por Ametic, el 66% de las empresas españolas ya tienen dificultades para contratar a especialistas en este ámbito.

El interés por aumentar la capacidad de producir semiconductores es común en toda la Unión Europea. Sobre todo después de los problemas de abastecimiento que se vivieron en 2021 y que afectaron a todo tipo de sectores. Por ello, desde Ametic entienden que las iniciativas españolas se tienen que contextualizar a nivel comunitario. Además, señalan que la competencia por el talento será también internacional y subrayan que "ahora tenemos los recursos, a través del Plan de Recuperación, nos falta la formación".

El Mapeo y la estrategia de formación que han hecho desde Ametic ha sido bien recibida por parte de las autoridades. Durante la presentación, el comisionado especial del PERTE Chip, Jaime Martorell, señaló que se trata de una herramienta indispensable que pretende contribuir al diagnóstico de la situación de la microelectrónica en España, y proporciona al Grupo de Trabajo de Microelectrónica de AMETIC y a la industria de un conjunto de datos para elaborar recomendaciones de estrategias de Políticas Industriales de Innovación.

No obstante, el plan de formación tiene un coste estimado de 145,6 millones de euros. Se trata de una cifra muy superior a la que el PERTE de los microchips tiene asignada a la formación, de 80 millones de euros. Dependiendo de si en España se instala una fábrica de microchips o si las iniciativas se centran en su diseño, la estrategia de formación se ejecutaría de una forma u otra, para lograr tener al talento necesario en cada uno de los escenarios posibles.

Convocatorias del PERTE

Además, del proyecto común europeo, el sector está pendiente de las convocatorias del PERTE. Este tiene un presupuesto de 12.250 millones de euros y "la principal fuente de financiación de este PERTE provendrá de la futura adenda al Plan de Recuperación y podrá estar sujeta a cierto grado de variabilidad, condicionada lo que se disponga en la aprobación final de la Comisión", reza la memoria del proyecto.

La vicepresidenta del Gobierno, Nadia Calviño, señaló que las convocatorias empezarían a salir en el primer semestre de este año. Sin embargo, el presidente de Ametic asegura a este periódico que los intereses del sector son que "las convocatorias salgan bien y que tengan condiciones competitivas con el resto de países de la Unión Europea", y que, aunque deberían acelerarse, la prioridad es que cuando se lancen las licitaciones, se hagan teniendo en cuenta la realidad del sector.

Éxito del PERTE

Sobre la posibilidad que alguno de los grandes fabricantes de chips se instale en España, Mier explica que se trata de "convencer a las empresas" y por eso, no hay plazos que cumplir. "Hay conversaciones intensas, pero se llevan de forma discreta", reconoce.

Preguntado durante la presentación del Mapeo del sector acerca de si la instalación de una de estas grandes empresas es fundamental o no para el éxito del PERTE, el presidente de Ametic respondió que "la prioridad es tener capacidad de diseño". No obstante, Martorell subrayó que "el plan sigue siendo traer fábricas a España".