El Gobierno ha presentado el borrador de la hoja de ruta que deberá tener España hasta 2030 en materia energética. El Plan Nacional de Energía y Clima (PNIEC) 2030 es un documento de algo más de 600 páginas, pero no es vinculante. Este material, además, es un borrador por lo que no se hará efectivo hasta septiembre del año que viene.
La presentación, a su vez, arroja una enorme incertidumbre ya que las elecciones de julio podrían dejar un cambio de gobierno y ser modificado enormemente. Sin ir más lejos, el Partido Popular ya ha confirmado que contempla el alargamiento de la vida de las plantas de energía nuclear, más allá de 2035. Y sin ir más lejos, el PNIEC que se ha presentado este martes ya se prevé el cierre de varias de ellas.
Con todo, el Gobierno ha lanzado un ambicioso proyecto en el que hace un enorme hincapié en las energías renovables. En concreto, para 2030 Para el año 2030, Moncloa prevé tener un objetivo de generación con energías renovables del 81% frente al 76% anterior y un aumento hasta el 48% en los usos finales de renovables frente al anterior 42%. Y el de eficiencia energética mejora hasta el 44%.
El Ejecutivo, a su vez, ha diseñado un plan en el que destacan las inversiones. Las previsiones que se recogen en el documento son de 294.000 millones de euros, de los que un 85% provendrá del sector privado y el 15% será público, especialmente impulsado por los fondos europeos (11%).
Apoyo de las renovables
Como se mencionaba anteriormente, el proyecto se basa en la proyección de instalación de renovables. Así, para el año 2030 se espera alcanzar los 62 gigavatios (GW) de eólica instalados, así como 76 GW de fotovoltaica, 4,8 GW de solar termoeléctrica, 1,4 GW de biomasa y 22 GW de almacenamiento.
De esta manera, se aspira a 105 GW de renovables nuevas en la década y 22 GW de almacenamiento energético en 2030, con un cese del carbón definitivamente que se adelanta a 2025.
Con la nueva hoja de ruta se pretende que nuestro sistema energético no sea tan dependiente de los combustibles fósiles, como es el caso del petróleo y del gas, que tantos vaivenes ha tenido durante los últimos meses y ha disparado el precio de los carburantes y de la electricidad. En concreto, se duplica la reducción de dependencia exterior a lo largo de la década prevista en el plan: cae en 22 puntos en el periodo.
Respecto al hidrógeno verde, una de las grandes esperanzas del Gobierno para ser un país consumidor de energías renovables se prevé alcanzar el 11 GW de electrolizadores para producir este combustible a través de fuentes renovables. En el PNIEC también se hace referencia al H2Med, el proyecto que unirá España con el resto de Europa a través de un corredor verde de esta fuente de energía.
También se incrementa la ambición de objetivos como el de rehabilitación de viviendas, con 1,38 millones, frente a 1,2 millones, o de disponer de un parque de vehículos eléctricos de 5,5 millones.
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