La inflación, la pérdida de poder adquisitivo o amortizar la deuda son algunas de las cosas por las que los españoles tiran de ahorro. Los datos muestran que las familias están recurriendo al dinero que tienen en los depósitos para poder hacer frente a la situación económica actual. También tiene gran peso en esta decisión que los bancos no remuneren estos productos, por lo que los españoles dirigen este dinero a productos de inversión que dan más rentabilidad.
Según los datos del Banco de España del mes de mayo, los hogares españoles retiraron 3.700 millones de euros en depósitos en un mes. Actualmente, las familias tienen 979.700 millones de euros en estos productos frente a los 983.400 millones de euros. Estos productos llegaron al billón de euros en diciembre de 2022, un nivel récord. De esta manera, en los cinco primeros meses del año, el ahorro de las familias en depósitos se ha reducido en 24.600 millones de euros.
Este producto suele ser uno de los favoritos por parte de los ahorradores más conservadores, porque no está sujeto a la volatilidad y tiene liquidez inmediata, es decir, se puede recurrir al dinero sin problema. Sin embargo, los grandes bancos no están remunerando los depósitos y se alejan incluso de una guerra del pasivo. Una situación que ha hecho que la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, haya exigido públicamente al sector que trasladen la subida de tipos a todos los productos, es decir, que remuneren los depósitos. De hecho, será uno de los temas que traten en la reunión con la banca de este jueves.
La banca se mantuvo en contra de esta exigencia y asegura que los depósitos “no son el mejor instrumento, ni el más eficaz”. Carlos Torres, presidente del BBVA, apuntó que el exceso de liquidez del sector es la principal razón por la que no se remuneran los depósitos y añadió que en el momento en el que se absorba se verá cómo evoluciona el mercado. Por su parte, el presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, y el consejero delegado de Banco Sabadell, César González-Bueno, fueron más tajantes y más críticos con las declaraciones de Calviño. González-Bueno avisó a la ministra que será la competencia la que marque cuándo se remuneran los depósitos y “no cuando lo diga ella”. De la misma manera reaccionó Goirigolzarri, que incluso ha ido más allá y ha señalado que ni el Gobierno ni las patronales tienen que marcar las decisiones en términos de política de precios. De hecho, ha ido más allá y ha apuntado que es algo que debe marcar cada banco.
Los bancos han optado por diseñar una serie de productos, como fondos o seguros de ahorro, para ofrecer una rentabilidad a los particulares, de tal manera que actualmente más de 40% de los recursos de los clientes está fuera de balance. Sin embargo, sí que ha comenzado la remuneración de los depósitos de las empresas, que fueron los que más sufrieron cuando los tipos estaban en negativo, ya que los bancos sí que cobraron estos productos para empresas.
De hecho, en el mes de mayo, las empresas también han aumentado su dinero en estos productos. Los datos del Banco de España muestran que las empresas tienen 298.900 millones de euros en depósitos, lo que supone 5.300 millones de euros más que en abril. A pesar de esta subida en el último mes con datos disponibles, el dinero en depósitos del sector empresarial ha caído en 18.900 millones de euros en los cinco primeros meses del año. A cierre de 2022, las empresas contaban con 317.800 millones en depósitos.
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