El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, ha sido tajante con la posible prórroga del impuesto a la banca. Gortázar ha cargado contra esta decisión y ha asegurado que “es pegarse un tiro en el pie” porque el sector bancario es “el sistema circulatorio de la economía”. El directivo ha señalado que con esta decisión se castiga a toda la economía porque hacen llegar la financiación a todos los sectores. “No es una buena idea”, ha manifestado. 

En esta línea, ha advertido que “un problema del sector financiero acaba siendo un problema de la economía”. Gonzalo Gortázar ha insistido en que es un gravamen “discriminatorio” porque además pone en riesgo el crédito que se pueda conceder ya que grava a los ingresos y no a los beneficios. De esta manera, también afectará cuando los beneficios caigan. Sobre esto ha incidido en que no son resultados extraordinarios a pesar de que la cifra lo pueda parecer, porque “hay que compararlo con la cantidad de accionistas y con los fondos propios”. 

Asimismo, ha recordado que la tasa es mayor que en otros sectores, porque de impuestos de sociedad ya pagan un 30% frente al 25% del resto de sectores. También ha explicado que CaixaBank compite en todo el país con otros bancos que están exentos de este impuesto, por lo que ha insistido en que es discriminatorio: “Parece que es una discriminación que no tiene sentido”. Por ello ha pedido un debate sereno sobre ello. 

“Los resultados extraordinarios caídos del cielo no se están produciendo, un 12% -de rentabilidad- no es extraordinario, y quien diga que 3.659 millones es extraordinario está ocultando la mitad de la realidad” porque “corresponde a 600.000 accionistas y a 37.000 millones de fondos propios”, ha puntualizado el consejero delegado. “Ese resultado extraordinario no existe” y “no se está produciendo, desde luego, en la banca, esto es un dato”, ha añadido

Gortázar reiteró que el impuesto “discrimina” a la banca regulada de la banca ‘en la sombra’ como fondos y también las tecnológicas, que no tienen que pagar este impuesto, y afecta a la competitividad de las entidades españolas frente al exterior. Igualmente, afirmó que es un impuesto que pagan sus accionistas y, por tanto, “es un impuesto al propio FROB, a la Fundación “la Caixa”, a 600.000 minoritarios”. “Que me lo expliquen, no lo entiendo”, añadió.

El consejero delegado ha sido preguntado durante la rueda de prensa de resultados de la entidad sobre la posición de Repsol, que advirtió de que el impuesto a las energéticas podría poner en riesgo las inversiones en España. Gortázar ha considerado que las grandes empresas tienen que asumir responsabilidades que van más allá de lo puramente económico. Además, ha rechazado “discriminar en negativo a las grandes empresas por ser grandes”, ya que son las que generan más productividad.

No obstante, el ejecutivo ha asegurado que CaixaBank no va a retirar las inversiones de un mercado que es el mayoritario para el banco, pero el impuesto sectorial “es un aliciente para no crecer en la financiación”.

Sobre la hipotética modificación de la fiscalidad que "tiene un componente político y todas las opiniones tienen que ser tenidas en cuentas. Es una materia técnica compleja porque el derecho fiscal de sociedades en las últimas décadas ha desarrollado una serie de cambios, que nuestra experiencia es de que se ha pagado más impuestos que antes".

Código de Buenas Prácticas

Por otro lado, el consejero delegado también fue preguntado por el funcionamiento del Código de Buenas Prácticas. A pesar de que el número de solicitudes es mucho menor de lo que se estimaba, Gortázar ha asegurado que es un acuerdo necesario. “El código sí que ha sido una buena idea y ha tenido una misión importante”, ha apuntado el ejecutivo. 

En lo que va de año, se están gestionando alrededor de 6.000 solicitudes de clientes que han pedido su adhesión al Código de Buenas Prácticas hipotecario. Adicionalmente, desde que se inició la subida de tipos se han gestionado cerca de 10.600 acuerdos de refinanciación a particulares y 9.800 novaciones de tipo variable a tipo fijo.

“El dolor que ha producido la subida del euríbor ha sido menor de lo esperado y se ha debido principalmente a que la economía ha ido mejor de lo esperado y al mantenimiento del empleo”, ha señalado. No obstante, ha reiterado que ha sido una “buena” idea aunque los números sean bajos, “queremos que la gente siga viviendo en sus casas”.