La Comisión Europea ha abierto la puerta a aquello de "la intención es lo que cuenta". Por este motivo, pese que el déficit de España cerrase en el 3,6% en 2023 podría evitar la apertura de un procedimiento de déficit excesivo (PDE), el primer paso para interponer una sanción por exceder el 3%, que exigen las reglas fiscales europeas.

"Si se vulnera ese importe pero es una vulneración cercana y temporal, entonces nos puede llevar a valorar otros criterios y no abrir un procedimiento de déficit excesivo", expresó el vicepresidente de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, en una respuesta tras la celebración del Ecofin, la reunión de los ministros de economía y finanzas de la Unión Europea.

Así, Dombrovskis repitió las palabras que había expresado el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, un día antes, cuando señaló que "no se trata solo del déficit de 2023, sino de llegar a ese 3% en un periodo corto de tiempo". Esa es la previsión del Ejecutivo, que el déficit se reduzca hasta el 3% este año, para volver a disminuir hasta el 2,5% en 2025.

Los cálculos también son optimistas con respecto a la deuda, ya que el Gobierno espera que se reduzca en 2,2 puntos porcentuales desde el 107,7% del producto interior bruto de 2023. Así, en 2024, la deuda sería del 105,5% y en 2025 se volvería a reducir hasta el 104,1%, según consta en el informe de situación macroeconómica que el ministro presentó este martes en el Consejo de Ministros.

Las nuevas reglas fiscales difieren de las anteriores a la pandemia en que se adaptan, en cierto modo, a la situación económica de cada uno de los 27 miembros de la Unión Europea. Los países que tengan una deuda pública que exceda el 90% de su PIB, como es el caso de España a día de hoy, tienen que reducirla a razón de un punto porcentual al año. Si se está entre el 60 y el 90%, se debe reducir medio punto porcentual cada año. En caso de que sea inferior, el objetivo es que se vaya reduciendo hasta lograr restar un 1% cada año. Por tanto, queda atrás la regla de reducir la deuda un veinteavo, presente en las normas anteriores.

Si el déficit está por encima del 3%, debe reducirse a razón de un 0,5% del PIB anual. Pero los demás también tendrán deberes, aquellos con menos de un 3% de déficit -primario- deberán reducirlo a razón del 0,4% del PIB al año, cifra que podrá reducirse a un 0,25% en caso de negociar una extensión de 4 a 7 años. Además, aquí la Comisión tendrá en cuenta los intereses de la deuda, para que ningún país sacrifique sus inversiones solo por ese gasto.

Si se tienen en cuenta estas indicaciones y las palabras de Dombrovskis, se da por hecho que España estaría "haciendo los deberes", como indicó Cuerpo y que podría evitar el procedimiento de déficit excesivo que sí parece más probable para otros socios comunitarios. Sin embargo, "todavía no hay nada decidido", añadió el ministro en relación a la valoración que tiene que hacer la Comisión.

Fecha clave: 19 de junio

Será el 19 de junio cuando la Comisión Europea anuncie a qué países abre el procedimiento de déficit excesivo y publique las recomendaciones para cada uno de los estados miembros. Diez de ellos superaron el 3% en el déficit de 2023, además de España (-3,6%): Italia (-7,4%), Hungría (-6,7%), Rumanía (-6,6%), Francia (-5,5%), Polonia (-5,1%), Malta (-4,9%), Eslovaquia (-4,9%), Bélgica (-4,4%), República Checa (-3,7%) y Estonia (-3,4%).

Con la entrada en vigor del nuevo marco europeo de reglas fiscales los países no tuvieron que enviar el Programa de Estabilidad a Bruselas, el pasado 30 de abril. Sin embargo, el Ejecutivo decidió enviar una actualización de las previsiones macroeconómicas y fiscales para 2024 y 2025, en las que consta esa previsión de reducir al déficit primero al 3% y luego al 2,5%.