Detrás de las grandes operaciones corporativas no solo hay despachos de abogados sino también consultoras especializadas. Las compañías recurren a ellas con frecuencia para que sus intereses lleguen a buen puerto. Pero cuando las cosas se complican o se quiere influir en el proceso regulatorio, optan por recurrir al lobby. Unas cuantas firmas dominan este mercado en España. Entre ellas, Acento, la consultora fundada en 2019 por el exministro socialista José Blanco a cuyos servicios habría recurrido ahora el BBVA para defender su Oferta Pública de Adquisición de acciones (OPA) sobre el Banco Sabadell. Un operación hostil a la que se opone el Ejecutivo de Pedro Sánchez.

La entidad que preside Carlos Torres habría contratado los servicios de esta consultora presidida por el también exministro del PP, Alfonso Alonso, según publicó hace unos días el diario El Mundo. El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, ya expresó su negativa a la compra por cuestiones de competencia. Precisamente, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) debe pronunciarse acerca de la misma.

El pasado mes de febrero se desató una gran polémica tras conocerse que el exministro de Consumo y exlíder de Izquierda Unida, Alberto Garzón, pretendía fichar por el lobby de Blanco. Tras la tormenta generada por una decisión que muchos compañeros de filas tachaban de 'puerta giratoria', terminó renunciando al puesto. En una carta, Garzón admitía sentir "frustración" por la reacción que desencadenó su anuncio y lamentó "las dinámicas tóxicas de la izquierda que todavía me persiguen".

El ex coordinador federal de IU dijo que desde su puesto en la consultora Acento "podría asesorar a entidades de la sociedad civil en materias como la ecología, la economía, los retos del futuro y el análisis político y legislativo". "Esas iban a ser mis tareas en la consulta, cuyo CEO y su equipo se han portado magníficamente bien conmigo y para quienes esta situación es particularmente injusta", indicaba sobre la empresa con sede en el paseo de la Castellana y que ha tenido como clientes a la Liga de Fútbol Profesional, a la tecnológica Huawei o farmacéuticas como ISDIN y Novartis.

Entre las filas de la consultora con estrechos lazos en el Gobierno y la oposición están Miquel Gamisans, delegado en Cataluña y director general adjunto. En su día ocupó el puesto de secretario de Comunicación de la Generalitat de Cataluña con ERC. También cuenta con otros políticos de los dos principales partidos, como la ex vicesecretaria general socialista Elena Valenciano. Asimismo, trabaja en la consultora Esteban González Guitart, el hijo del 'popular' Esteban González Pons.

Tras la marcha a Moncloa del socialista y fundador de la compañía, Antonio Hernando, Blanco fichó para el puesto de director general a Guillermo Martínez Suárez, consejero de Presidencia del Principado de Asturias durante el mandato del también socialista Javier Fernández.

Entre el elenco de expolíticos de la consultora inscrita en el registro de lobistas de la Unión Europea también está el ex secretario general de Sanidad con el PP, Rubén Moreno. Algo que le ha servido para potenciar el flanco sanitario.

También figura como miembro de dicho consejo el exministro socialista de Trabajo, Valeriano Gómez. Están también la expresidenta del grupo Hispasat y secretaria de Estado de Economía con José María Aznar, Elena Pisonero; o el ex secretario de Cultura con Mariano Rajoy, José María Lasalle.

Recientemente, la consultora incorporó Ignacio Bengoechea Martí, teniente general y Segundo Jefe del Estado Mayor del Aire (JEMA), tras su paso a la reserva. La firma reforzaba así su negocio en el sector de Defensa, en plena guerra de Ucrania y ahora de Israel.

La consultora del también ex secretario de Organización socialista con José Luis Rodríguez Zapatero dice aplicar un modelo único de supra-especialización en asuntos públicos, con grupos de trabajo dedicados y expertos en energía, sanidad, movilidad, sostenibilidad, deporte y fusiones y adquisiciones (M&A). Asimismo, aseguran contar con un equipo de "sólida y transversal experiencia política y de gobierno a nivel europeo, estatal, autonómico y local".

La consultora tiene una oficina en Bruselas. Según publicó hace un año El Independiente, el lobby de Blanco realizó trabajos de asesoría para la gestión de "temas de agenda" de una agencia de cooperación marroquí a finales de 2022. Según sus últimas cuentas públicas correspondientes al ejercicio 2022, la consultora presentaba 6,2 millones de euros en ingresos y 1,5 millones de euros de beneficio.