La recaudación tributaria continúa dando grandes alegrías a Hacienda. Los ingresos continúan creciendo a un ritmo muy elevado: un 7,2% en el mes de abril, en comparación con el mismo mes del año anterior, y un 7,4% en el primer cuatrimestre. En total, el Estado se ha embolsado 36.953 millones en el mes de abril y 97.339 millones de enero a abril, acercándose a los 100.000 millones en cuatro meses por primera vez en la historia, según los datos del último informe de recaudación tributaria, que se ha conocido este viernes. 

El impacto de la inflación continúa notándose en las arcas públicas, y lo haría algo más de no ser por las rebajas de impuestos que continúan vigentes. Fue el Banco de España quien calculó a finales de abril que las subidas de precios estaban impulsando con fuerza la recaudación pública, y, en concreto, que entre 2019 y 2024 Hacienda habría ingresado 11.000 millones de euros “de más” gracias a no haber indexado el IRPF al IPC. Los mismos cálculos apuntaban también que el tipo medio efectivo alcanzará el año que viene el 15,3%, el mayor de la historia y un 20% mayor que el de 2019, si no se toman medidas para remediarlo.

“El crecimiento de los ingresos homogéneos por el IRPF fue, hasta abril, del 9,4% y sobrepasaría el 11% de no haberse perdido ingresos por los cambios normativos y de gestión”, apunta la propia Agencia Tributaria en el informe. Las retenciones sobre los rendimientos del trabajo y sobre las rentas del capital mobiliario explican más de la mitad del aumento de la recaudación, incide también, pero también influye el aumento de las declaraciones de las pymes.

Con todo, el crecimiento de los ingresos por IRPF se ha desacelerado por la moderación de la creación de empleo y por las menores subidas salariales, tras incrementos superiores al 4% en el primer semestre del año pasado. Por su parte, los datos muestran un muy buen comportamiento de la marcha de los beneficios en el comienzo del año, ya que las retenciones y los pagos fraccionados han crecido tanto en empresas personales (por encima del 9%) como en el impuesto de sociedades (8%).

En abril es cuando Hacienda cobra el primero de los tres pagos fraccionados del impuesto de sociedades, que en este caso ha dejado 9.941 millones de euros en un mes, un 7,5% más que el año anterior, pero un 22% más en el conjunto del cuatrimestre. “Los resultados de las retenciones del primer trimestre de las pymes, aunque con incrementos menores que los del resto del sector privado por la nueva rebaja de los tipos, fueron mejores que los de trimestres precedentes”, recalca el informe.

Las rebajas del Gobierno han costado 904 millones

El IVA se ha recuperado frente a los registros de la segunda mitad del año pasado, pero sigue afectado por la reducción de los precios de la energía y la rebaja de los impuestos sobre los alimentos, que podrían retirarse en julio. Este impuesto explica la mayor parte de la mejora en la imposición indirecta, que aumenta un 5%, y también se ve beneficiado por la subida de tipos en electricidad y gas. En total, la Agencia Tributaria calcula que las medidas normativas de enero a abril ha restado un punto al crecimiento de los ingresos, y que en total el coste ha sido de 904 millones de euros.

La rebaja en el IRPF ha resultado ser la medida más cara, al reducir en 713 millones los ingresos de Hacienda durante estos cuatro meses (101 del lado de las grandes empresas, 375 de las pymes y 237 procedentes de las pensiones). La rebaja del IVA de los alimentos ha sido la segunda medida más costosa, con un precio de más de 442 millones de euros, seguida de la compensación de pérdidas en grupos, que ha costado 225 millones en el capítulo del impuesto de sociedades.

Las devoluciones a mutualistas, a consecuencia de las sentencias del Tribunal Supremo, son las que han costado al Estado 124 millones de euros en el primer cuatrimestre. Las sentencias obligan a revisar las declaraciones de los últimos años para ofrecer la posibilidad de reducir los rendimientos del trabajo en el caso de pensiones de jubilación o invalidez a aquellos mutualistas que en su momento no pudieron reducírselas o minorárselas.