La Comisión Nacional del Mercado de la Competencia (CNMC) está analizando en primera fase (de las tres) la opa de BBVA sobre Banco Sabadell. Cani Fernández, la presidenta del organismo, ha negado presiones políticas en este proceso, pero ha recordado que el Gobierno puede imponer condiciones en la operación en la fase tres. Fernández ha señalado que están comenzando a analizar la operación, por lo que no puede estimar cuánto tiempo durará el proceso, ya que tienen tres meses, pero que se paralizan cuando piden información.

Sobre el rechazo del Gobierno a esta opa, Cani Fernández ha insistido que “no me constan” presiones políticas durante su intervención en el XLI Seminario de la Apie y la Universidad Menéndez Pelayo en Santander. "Existe una tercera fase en la que está prevista una visión política. En ese marco, efectivamente el Gobierno puede imponer nuevos requisitos que se ajusten a la norma", ha apuntado.

El expediente, que BBVA registró el pasado 31 de mayo, se encuentra ahora en su fase inicial, la de recabar información, que tiene una duración de un mes, aunque ese plazo se puede ir suspendiendo a medida que se recibe documentación.

Una vez finalizada esa primera fase, será el momento en que el Consejo y la dirección de la CNMC expresen su opinión, que excepcionalmente dentro de la UE puede incluir compromisos que asumen los participantes o condiciones que puede imponer el organismo.

La CNMC también puede oponerse a la operación y prohibirla. Y, a partir de ese momento. puede intervenir el Consejo de Ministros si el Ministerio de Economía eleva la cuestión al órgano colegiado, en concreto poniendo condiciones "motivadas por razones de interés general", ha explicado.

Sobre la discrecionalidad de esta decisión, la presidenta de la CNMC ha señalado que "está bien definido en la ley los criterios en base a la cual se pueden elevar estas cuestiones al Consejo de Ministros".

Y es que "hay una fase que ya no está basada estrictamente en competencia, pero se recogen objetivos de interés general que se establecen claramente en la ley", ha precisado.

Cani Fernández ha recordado otras operaciones de concentración anteriores, como la de la Caixa sobre Bankia, y ha señalado que en aquel caso el análisis trascendió el nivel nacional y se llevó a cabo prácticamente "código postal por código postal", para asegurar cuál podía ser su impacto en aspectos como la retirada o ingreso en efectivo en cajeros en determinados territorios. 

Asimismo, también ha hecho referencia a la preferencia de Luis de Guindos, vicepresidente del Banco Central Europeo, a que las fusiones sean trasnfronterizas. En este aspecto, ha asegurado que el análisis sería igual, aunque ha matizado que hay menos solapamientos. Pero ha incidido en que habría que verlo caso por caso: “El caso de que vengan de fuera o de dentro nos da igual, hacemos un análisis de dónde va a un consumidor a sacar dinero o a contratar un producto”. 

Cani Fernández ha recordado que el hecho de que haya menos bancos no quiere decir que haya menos competencia, ya que ha asegurado que con bancos grandes también puede suponer que haya competencia para que el cliente pueda elegir.