Kiabi, la cadena francesa de ropa a bajo precio alcanzó hace unos días las 70 tiendas en España, siete más que las de su rival irlandés Primark. La compañía es propiedad del grupo Mulliez, dueño de otras grandes cadenas como Alcampo, Decathlon o Leroy Merlin. Aterrizó en España en 1993 y ahora es su segundo mercado por volumen de ventas a nivel internacional. En 2023 facturó 210 millones de euros, un 10% de las ventas totales del grupo de moda presente en 28 mercados.

Ahora, la firma ha decidido integrar sus operaciones en España y Portugal para consolidar y fortalecer su presencia en ambos mercados. José Luis Carceller, hasta ahora Director General de Kiabi en España, asumirá también la dirección del país luso al que llegó en 2010 y donde tiene 12 tiendas.

Tras tres décadas en España, la compañía dio a partir de 2020 un acelerón a sus aperturas en nuestro país. Más del 26% del parque actual ha levantado la persiana desde entonces. En la compañía dicen ser optimistas de cara a este ejercicio tras haber elevado el año pasado un 3% su cifra de negocio y aseguran estar ya "consolidados como líderes de mercado en los segmentos infantil y bebé".

Su objetivo pasa por "aumentar la capilaridad y el alcance" de su marca. Para ello, se apoyan en una estrategia a través de todos los canales de venta, "en la que la tienda física complementa al negocio online y con la que ganamos en fidelización del consumidor".

A principios de año, la compañía anunció una nueva dirección estratégica liderada por Mercedes Porro que pasa por potenciar su modelo tradicional de tiendas, el desarrollo de operaciones corporativas y el lanzamiento de nuevas marcas.

Respecto a la expansión física, su meta es entrar en aquellas provincias en las que aún no tienen presencia. "De hecho, en las últimas semanas nos hemos expandido en Alicante (Petrer) y Castilla y León (Burgos)", recalcan las citadas fuentes de la empresa. "El objetivo es seguir ganando presencia y estamos abiertos a todas las oportunidades", abundan.

Del total de tiendas, solo cinco de ellas son bajo modelo de franquicia, "pero el objetivo es seguir conquistando el mercado nacional con el modelo más idóneo en cada zona", añaden.

Al centro de las ciudades

La compañía gala cuenta en España con siete tiendas más que su rival irlandés Primark. Y ahora mismo está desarrollando un nuevo concepto de tienda de un tamaño medio de en torno a 800 metros cuadrados. Son establecimientos notablemente más pequeños que los actuales, que cuentan con unos 1.500 metros cuadrados situados en su mayoría en centros comerciales. "Este modelo de tienda más compacto nos permitirá ubicarnos en los centros de las ciudades y aumentar su penetración en el mercado español, especialmente en ciudades secundarias", detallan.

La integración de sus operaciones en España y Portugal, explicó este miércoles Carceller, "representa un paso significativo en nuestra estrategia de crecimiento internacional". En todo el mundo tiene 600 tiendas y una plantilla de 10.000 empleados. "Unir nuestras operaciones en España y Portugal
nos posiciona de manera sólida para capitalizar nuevas oportunidades y fortalecer aún más nuestra presencia en la región", remató.

La compañía fundada en el norte de Francia en 1978 es una de las firmas que forma parte de la Asociación Retail Textil España (ARTE), la patronal textil que también agrupa a otras grandes cadenas como Inditex (Zara, Pull&Bear, Bershka, Massimo Dutti...), H&M, Sprinter, Mango, Pepco, Primark, Tendam (Women’secret, Springfield, Cortefiel...) y Uniqlo.