El ex consejero delegado de Globalia, Javier Hidalgo, ha sido citado a declarar ante la Audiencia Nacional como testigo en el denominado 'caso Koldo'. Desde que estalló la trama, el hijo del fundador de la compañía Juan José Hidalgo, ha permanecido alejado de los focos e incluso ha declinado responder ante la comisión de investigación abierta en el Parlamento balear. Ahora, sí deberá comparecer ante el juez Ismael Moreno.
Hidalgo hijo dejó su cargo ejecutivo en Globalia en 2021 tras haber logrado encarrilar por segunda vez la venta de la aerolínea a Iberia. Una operación que sigue coleando en Bruselas, pendiente de autorizarse por parte de la Comisión Europea. Tras la pandemia, la venta anunciada en 2019 terminó encallado e Iberia parecía echarse atrás por momentos. La aerolínea que dirige desde 2022 el exdirectivo de El Corte Inglés Jesús Nuño de la Rosa atravesó una grave situación financiera que motivó el mayor rescate público concedido por el Gobierno de Pedro Sánchez.
La aerolínea obtuvo 616 millones de euros; 475 de ellos a través del Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas que gestionaba la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y 141 millones a través de un crédito sindicado avalado por el Instituto de Crédito Oficial (ICO). Pese al monto, Hidalgo padre aseguró este mismo fin de semana durante la inauguración de la ruta Madrid-Santiago de los Caballeros (República Dominicana) que "nadie intervino para hacer ningún rescate", sino que recibió un crédito avalado por su propio patrimonio.
Pese a los acercamientos al grupo Air France-KLM, Hidalgo hijo negoció de nuevo la venta al grupo hispano-británico IAG (matriz de Iberia) por la mitad de los 1.000 millones inicialmente anunciados, asegurándose de que la antigua aerolínea de bandera pusiera dinero por adelantado. Ahora mismo ya tiene un 20% de la aerolínea tras haber pagado 100 millones de euros.
Pero tras aquella batalla y desde el estallido de la presunta trama de corrupción gestada en el seno del ministerio de Transportes que dirigía el ya exministro José Luis Ábalos, Hidalgo hijo no se ha dejado ver en público más que en una o dos ocasiones. Según publicó el medio especializado en turismo Preferente, el exCEO de Globalia estaría residiendo en Botsuana desde poco después de que se destapase la polémica en la que también se investiga a la mujer del jefe del Ejecutivo, Begoña Gómez. Una filial de Globalia, Wakalua, habría patrocinado actos del Instituto de Empresa (IE) África Center que dirigía esta última.
Fuentes que conocen bien al empresario aseguran que el país del sur de África "encaja perfectamente con su obsesión por el ecoturismo". En este sentido, destacan la afición de Hidalgo por los complejos turísticos con cabañas ecológicas de madera. Ya lo mostraba cuando abandonó el holding tras haber vendido la agencia Halcón Viajes al grupo turístico Ávoris.
Ahora mismo, Globalia no cuenta con la figura de consejero delegado y fuentes de la empresa aseguran que Hidalgo hijo solo es accionista de la misma (retiene un 9,9% del capital). El holding familiar apenas tiene ahora una aerolínea en venta y el operador de handling (servicios de asistencia en tierra) Groundforce, que ha conseguido hacerse con varios contratos de Aena.
El empresario regresó en 2016 a la compañía que había dejado tres años antes. Su hermana María José también estaba llamada al cargo directivo. Aunque finalmente fue Javier Hidalgo quien fue elegido tras vender la compañía telefónica que había fundado en 2006, PepePhone, por más de 160 millones de euros.
Hasta ahora, Hidalgo no había sido citado a declarar en las pesquisas del caso, pero la Sala de lo Penal entiende que se trata de una diligencia útil y pertinente para esclarecer cómo se gestionó la contratación a Air Europa del servicio de transporte de las mascarillas en plena pandemia. La compañía fue contratada para varios servicios que están bajo la lupa de la Justicia.
Contratos con Aldama
Los magistrados, informa Irene Dorta, consideran que Hidalgo podría arrojar luz sobre "el pago por tales servicios, incluidas las comisiones, y a quién se pagaron las mismas". Los empresarios Juan Carlos Cueto y Víctor de Aldama (representante de Air Europa ante el Ministerio de Transportes) forman parte de los principales investigados por este caso que afecta también al que fuera asesor del exministro Ábalos, Koldo García.
En total, la Guardia Civil habla de una contratación con Air Europa de diversos vuelos para el transporte de mascarillas por importe de 2,1 millones de euros. También con Globalia Broker para el mismo fin, por importe de 1,1 millones euros.
El escrito de la Audiencia Nacional señala que el CEO de Globalia "obtuvo por los servicios de transporte aéreo prestados, los pagos pertinentes de la mercantil investigada Soluciones de Gestión y al parecer pagó también una cantidad de dinero en concepto de comisión al investigado Víctor de Aldama a través de la mercantil MTM 180 Capital S.L.". La Fiscalía Anticorrupción considera que se gestó una trama de corrupción y acusa a los sospechosos de delitos de malversación, prevaricación, blanqueo de capitales y organización criminal.
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