Este viernes 23 de agosto se verán las caras en la Comisión de Transportes del Senado. El ministro Óscar Puente comparecerá para dar cuenta de la complicada situación que atraviesa el sistema ferroviario español este verano. A su lado se sentará como presidente del órgano parlamentario su sucesor en la alcaldía de Valladolid, Jesús Julio Carnero (PP), que compatibiliza el cargo con su condición de senador. Este último ha encargado un estudio técnico con el que sumará un capítulo más a la particular batalla que mantienen abierta por el soterramiento del tren en la capital del Pisuerga; la gran promesa electoral del actual regidor y que rechaza el ahora ministro.

El alcalde 'popular' ha pedido -informó este miércoles El Norte de Castilla- un informe con el que rebatir las cifras que contiene el estudio aportado por Adif hace unos meses sobre la posibilidad de enterrar las vías a su paso por la ciudad. El estudio de la empresa pública analiza los dos escenarios posibles y calcula que la llamada integración en superficie podría estar concluida en un máximo de seis años, mientras que enterrar el trazado podría llevar entre 17 y 19 años.

La inversión para la primera sería de 1.500 millones de euros frente a los 2.765 millones del segundo escenario. Además, el informe de la empresa pública que preside Ángel Contreras defiende la "flexibilidad" que ofrece la solución en superficie frente a la "rigidez" de la opción soterrada. Asimismo, recuerda que las obras de la primera ya están en marcha, mientras que lo otro implicaría empezar "de cero" en unos ocho años.

Pero la actual corporación local no acepta esos números y ha encargado un informe técnico propio para analizarlos y tratar de demostrar que el soterramiento es viable frente a la negativa del actual titular de Transportes. El encargo se ha realizado a la empresa de consultoría Eficia, una firma con sede en Madrid y que realiza trabajos para empresas como Acciona; administraciones como el ministerio de Fomento; o la patronal Seopan.

El administrador y director de Operaciones de la misma es el ingeniero de caminos Juan Ayres Janeiro, con experiencia en obra civil y edificación. Uno de sus dos hermanos, Ignacio Ayres Janeiro, pasó por el ministerio de Fomento como asesor de gabinete durante la etapa de Íñigo de la Serna (PP). Fue consejero de Ineco (la empresa pública que firma el estudio de Adif) y también pasó brevemente como asesor en el gabinete de presidencia del propio Adif. Ahora ocupa el puesto de Director General de Servicios Sociales e Integración en el Gobierno de la Comunidad de Madrid que preside Isabel Díaz Ayuso. El otro socio de la consultora también es hermano de otra directora general del ejecutivo regional del PP.

Fuentes del Ayuntamiento de Valladolid consultadas por El Independiente aseguran que la selección de la consultora se realizó mediante un contrato menor para el que se invitó a participar a una terna de empresas, de la que Eficia fue la seleccionada por un importe que no alcanza los 18.000 euros; el máximo permitido por la ley para este tipo de contratos 'a dedo'. Por su parte, fuentes de la compañía consultadas niegan que los vínculos familiares de los directivos hayan tenido algún tipo de influencia en la adjudicación.

Dado el gran volumen de documentación a analizar, la empresa ha solicitado al Ayuntamiento un aplazamiento y prevé entregar el resultado a finales de septiembre. Con ello se verá si hay una solución técnica mejor y más económica que la planteada por los técnicos del Gobierno central para soterrar los cerca de ocho kilómetros de vía que dividen la ciudad. Dado el pequeño importe del contrato, el informe no podrá profundizar demasiado en los aspectos técnicos, así que se limitará a hacer un estudio de los planteamientos de Adif. Es decir, no será equiparable a un anteproyecto alternativo, que tendría un coste millonario.

El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, durante el acto de presentación de distintas opciones de integración del ferrocarril en la ciudad en febrero de 2024. Photogenic/Claudia Alba / Europa Press

Aunque en sus inicios como candidato Puente defendía la posibilidad de soterrar, tras llegar al cargo en 2015 acabó optando por impulsar la denominada 'integración' en superficie. Es decir, dejar las vías como están a cambio de mejorar la red de túneles y pasos inferiores para peatones. Lo hizo tras el millonario agujero creado con la operación durante la etapa del exalcalde del PP, Javier León de la Riva, que gobernaba la ciudad desde 1995. La idea de este último era llevar adelante el proyecto con la venta de terrenos liberalizados en los ahora antiguos talleres de Renfe junto a la estación Campo Grande. Pero la crisis del ladrillo dio al traste con esa posibilidad.

Para las elecciones de mayo de 2023, un excompañero de filas de Puente que perdió las primarias de 2015 contra él -Cecilio Vadillo- decidió montar una plataforma electoral por el soterramiento. Los votos que obtuvo pudieron tener influencia en el negativo resultado de los comicios para Puente. Tras no poder renovar el bastón de mando local gracias al pacto del PP con Vox, Pedro Sánchez llevó a Puente a convertirse en la máxima autoridad política en el ámbito del transporte en España.

Desde la cartera que heredó de Raquel Sánchez ha insistido en su tesis de que el proyecto que defiende Carnero es económicamente imposible de asumir para las arcas públicas. "El soterramiento es una infraestructura que no es viable. Si fuera viable, ya se habría hecho (...) No se va a hacer de ninguna de las maneras", zanjó en una entrevista a las pocas horas de tomar posesión como ministro. Cuando se conozcan los resultados del nuevo informe técnico encargado por Carnero, la batalla que mantiene paralizadas las obras de integración promete continuar.