La unión del mercado de capitales no avanza al ritmo al que le gustaría al Banco Central Europeo (BCE) ni tampoco según los objetivos que se ha marcado la Unión Europea. Poner de acuerdo a los 27 estados miembros es una tarea compleja y, por ello, el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, presentará este lunes una propuesta ante las economías del euro para tratar de desencallar la situación.

Según ha avanzado Cuerpo en una entrevista en Financial Times, propondrá que cuando al menos tres estados miembros se pongan de acuerdo en un asunto relativo a la unión del mercado de capitales, puedan avanzar en la misma, sin tener que esperar que el resto esté de acuerdo.

El ministro español apuesta por un "laboratorio de competitividad" que permita a los países participantes poner a prueba ideas para profundizar en la integración de áreas que van desde la titulización de activos financieros hasta la armonización fiscal, explica EFE.

El informe del ex primer ministro italiano Mario Draghi y también el de Enrico Letta abordaban esta realidad, en la que se insta a los estados miembros de la Unión Europea a derribar las barreras normativas nacionales para que las entidades europeas puedan competir con las estadounidenses y las chinas.

El objetivo es que los ahorros de los europeos se queden en el viejo continente y que las empresas comunitarias no tengan que recurrir a la financiación de Estados Unidos para seguir creciendo. Para ello, son necesarios bancos transfronterizos en Europa.

A su llegada a la reunión del Eurogrupo, que se reúne en Luxemburgo este lunes, Cuerpo ha explicado que la propuesta de España es "un catalizador de cooperación de entre países". El ministro ha hecho referencia al "mensaje de urgencia" del informe Draghi "que nos dice que vamos con retraso en materia de competitividad", ha añadido.

El primer paso, según la propuesta de Cuerpo adelantada en la publicación británica, consistiría en un sistema de calificación crediticia armonizado para pequeñas y medianas empresas, aquellas que tienen más dificultades para acceder a la financiación.

El ministro lo ha explicado como si se tratase de un sandbox, un laboratorio de pruebas que se utiliza para probar las consecuencias de proyectos innovadores al margen de que no tengan una regulación que los acompañe. Cuerpo ha dicho que cuando se vaya viendo el resultado de ese sistema de calificación crediticia podrían sumarse otros países.

Más adelante sería necesaria la creación de un organismo de supervisión bancaria, pero este es uno de los asuntos que rechazan algunos países más pequeños, que defienden que esta tiene que seguir siendo una competencia nacional.