Cox prevé cubrir en torno a la mitad de sus necesidades de capital para su plan de crecimiento a medio plazo, focalizado en agua y energía, con los fondos que le reportará la salida a Bolsa, que se producirá el 14 de noviembre, según consta en el folleto que la empresa ha remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

La multinacional, que reveló el rango de precios de su salida a Bolsa fijado entre 10,23 y 114,8 euros, espera obtener unos ingresos brutos de hasta 200 millones de euros (hasta 230 incluyendo la opción de sobreadjudicación).

El resto de las necesidades, según explica en el folleto remitido a la CNMV, las prevé cubrir a través del crecimiento del negocio proveniente de las concesiones de agua y energía, así como de los proyectos de generación de energía cautiva; tanto las ya existentes como las de nueva adquisición.

A 31 de diciembre de 2023, el crecimiento orgánico del negocio supuso un 13%, mientras que en el primer semestre de este año, Cox ya obtuvo ingresos de 306 millones de euros, 196 millones más que en el mismo periodo del año anterior.

En este sentido, la empresa tiene identificadas oportunidades cuyas necesidades de capital ascienden a un total de 403,46 millones, fundamentalmente en agua, donde las inversiones supondrían unos 285 millones, pero también se incluyen líneas de transmisión y proyectos de generación de energía.

Cox está "bien posicionada" en el mercado de agua para poder aprovechar el momentum, "al contar con las certificaciones, experiencia y reconocimiento a nivel global, según subrayan fuentes del sector citadas por la compañía. De hecho, la propia empresa detalló el pasado 7 de octubre, cuando anunció su intención de salir a cotizar, que en el sector del agua el panorama competitivo es limitado, ya que la industria requiere una alta especialización.

El mercado de la desalinización

Según datos que recoge Cox en su folleto, el mercado mundial de infraestructuras vinculadas a la desalinización puede alcanzar los 29.900 millones de euros en 2030. La compañía actualmente ya gestiona el 10% de la capacidad mundial instalada en tratamiento y desalinización del agua y busca consolidar su posición en este mercado en auge.

De hecho, recientemente anunció la firma un acuerdo vinculante para convertirse en accionista de Green Atacama SpA, una operación que supone la compra de dos desaladoras para suministrar 485.000 metros cúbicos diarios en el norte de Chile y que acelera el crecimiento de la empresa en este segmento, ya que le permitirá alcanzar el 24% de sus objetivos de negocio en agua hasta 2027.