Menos de 30 días después de su paso por España, el recuerdo devastador de la DANA mantiene la misma intensidad. La cifra de fallecidos es, por el momento, de 227 personas y todavía se busca a ocho desaparecidos. Como cada año desde 2016 y antes de vivir el fenómeno extremo que iba a sacudir el sureste de la península Ibérica, la Fundación Aon España trabajó en su Barómetro de Catástrofes 2023 que ha sido presentado en Madrid.
El estudio cuantifica las consecuencias de los desastres naturales que zarandean España desde el punto de vista económico, social, medioambiental y cultural con el objetivo de contar con un diagnóstico preciso del daño, intensificar las labores de prevención y concienciar a la población de la importancia de estar asegurado.
El barómetro, realizado con la colaboración del Consorcio de Compensación de Seguros, Agroseguro, UNESPA (Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras), Instituto de Ingeniería de España y Afi, entre otros, repasa desde el coste asegurado de las catástrofes, hasta el impacto de los desastres en la cesta de la compra, pasando por el golpe de las mismas al tejido productivo y al empleo o el coste humano.
2023, récord en gasto para los seguros
Según el Barómetro de Catástrofes de la Fundación Aon, el coste total de estos sucesos producidos en España en 2023 se elevó a 4.450 millones de euros, lo que supone una marca récord que se eleva un 53,45% respecto a la de 2022.
"Desgraciadamente, todas estas estadísticas saltarán por los aires este año con la impagable tragedia en vidas humanas y los incalculables daños materiales y psicológicos causados por la DANA", afirmó Pedro Tomey, presidente del Observatorio de Catástrofes de la Fundación Aon España.
Más de la mitad de los costes asegurados en 2023 -1.241 millones frente a un total de 2.449 millones- fueron cubiertos por Agroseguro, lo que evidencia la especial vulnerabilidad del sector agrícola. La sequía (31%) y las tormentas, lluvias y pedrisco (29%), fueron los eventos que más daños provocaron en la agricultura española, especialmente para los cultivos de cereales de invierno.
Una de las conclusiones que apunta la Fundación Aon es que "una mayor indemnización por desastre natural, provoca una mayor caída en los rendimientos y en la producción agraria, que aumenta el precio final soportado por el consumirdor. El suceso natural que más daños causó fue la sequía en cultivos herbáceos, que afectó durante todo el año a las provincias cerealistas y que generó 421 millones de costes acumulados. En 2022, los daños por sequía se habían situado en 92,2 millones de euros.
Otros desastres con un impacto relevante fueron los pedriscos del verano, con un coste asegurado de 206 millones de euros (42 millones en 2022), y las DANAS de Toledo y Madrid, a principios de septiembre, con 166 millones de euros. Las inundaciones de Zaragoza, en julio, supusieron 82 millones de euros.
Impacto de las catástrofes en la cesta de la compra
2023 estuvo marcado por un contexto inflancionario en el que la energía y los efectos de la guerra de Ucrania impulsaron el precio de los alimentos. El barómetro de Fundación Aon refleja que la cesta de la compra ha estado notablemente afectada por los desastres naturales.
De una año para otro, la cesta de la compra se encareció un 10%. Productos como carnes, pescados y otros alimentos que no están tan afectados directamente por desastres naturales participan en este salto. Los alimentos frescos aumentaron su valor un 7,8% y los productos que utilizan cultivos afectados por desastres se dispararon hasta el 10,6%. Esta subida no tiene porque estar provocada por los desastres: los diezmados por sequía subieron un 11,1% su coste.
Una de las conclusiones más destacadas del informe refleja que, con motivo de las catástrofes naturales en 2023, los precios a los que compraron los hogares con ingresos bajos se incrementaron un 14,5% frente al 7,8% de los hogares con ingresos altos. Es decir, a menores ingresos, mayor es el incremento de los precios.
La cercanía al campo o el tamaño del municipio de residencia influye en los cambios experimentados a la hora de llenar la nevera. El carrito general fue más costoso para familias con niños menores de 6 años, y la variación en los precios de los productos afectados por desastres fue un 15% más significativo para las familias con niños de 6 a 15 años.
Asimismo, los habitantes de localidades de tamaño medio, entre 10.000 y 100.000 personas, son los que más han sufrido la escalada de su cesta de la compra como consecuencia de los desastres naturales.
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