El Gobierno ha acordado prolongar la vigencia del Plan Moves III, de apoyo a la compra de vehículos eléctricos y a la infraestructura de recarga, hasta el próximo 30 de junio. También ha acordado mantener el próximo año la deducción del 15 % en el IRPF a quien compre un modelo de estas características. En el último Consejo de Ministros del año, el Ejecutivo ha prorrogado también la prohibición de interrumpir los suministros básicos de agua, luz y gas para familias vulnerables, en tanto que los niveles de descuento "excepcional" del bono social eléctrico se extenderán hasta el 31 de diciembre de 2025.

Por lo que respecta a la movilidad sostenible, se mantiene el apoyo con medidas como un marco de impulso a las bicicletas de pedaleo asistido, y la extensión de la deducción del 15 % en el Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF) a la hora de comprar un vehículo eléctrico hasta finales del próximo ejercicio. Aunque la iniciativa más sonada es la ampliación temporal del Plan Moves III, que busca fomentar la electromovilidad en España, como reclamaba el sector de la automoción ante su inminente fin.

Este programa -que cuenta con una dotación total de 1.550 millones de euros, cifra histórica en una línea de estas características- seguirá vigente hasta el próximo 30 de junio, período en el que las comunidades podrán continuar atendiendo las peticiones que reciban.

Por otro lado, el Gobierno ha prolongado la situación de excepcionalidad del bono social de electricidad destinado a los consumidores vulnerables y vulnerables severos, que se reforzó para dar respuesta a la crisis energética provocada por la invasión de Ucrania. Estos descuentos, originalmente fijados en el 25 y el 40 %, se incrementaron hasta el 65 y el 80%, respectivamente.

Ajustes en el 'bono social'

Dada la evolución de los mercados, el pasado junio se estableció una vuelta a la normalidad progresiva que estaba previsto que terminara en julio de 2025, con unos nuevos descuentos: los consumidores vulnerables tendrían una reducción del 35 % en lugar del 25 % anterior a la crisis, y los vulnerables severos, del 50 % en vez del 40 % previo.

La norma aprobada esta mañana da más plazo para realizar este ajuste progresivo, de modo que el bono social alcanzará su nivel "reforzado" de normalidad sólo a partir del 1 de enero de 2026, no antes. Así, a partir de comienzos del próximo año, los consumidores vulnerables tendrán un descuento del 50 %. Desde el próximo 1 de julio, será del 42,5 % y el 1 de enero de 2026 se estabilizará en el 35 %.

Los vulnerables severos, por su parte, tendrán un descuento del 65 % a partir del 1 de enero; del 57,5 % desde el 1 de julio, y del 50 % en 2026.

Como parte del esquema de protección, el Ejecutivo ha dado luz verde a mantener un año más la prohibición de interrumpir los suministros básicos de agua, luz y gas para los consumidores vulnerables establecida en 2021.

Por último, ha acordado seguir con el descuento del 80 % de los peajes para las industrias electrointensivas hasta finales de 2025.