El fondo Nazca Capital, propietario del 84% de Filmin, ha contratado a la asesoría Arcano Partners para coordinar la venta de la plataforma de cine. La operación, adelantada por Expansión este martes, podría alcanzar los 50 millones de euros. Pero está por ver quién tiene interés en acometerla.

De inmediato, los rumores han señalado a Movistar Plus+ y a Prime Video como los mejor posicionados para comprar Filmin. Este periódico se ha puesto en contacto con ambas compañías para consultarles sobre su posible interés, y la respuesta oficial ha sido similar en los dos casos. Desde Prime Video España aseguran que "no hay información al respecto ahora mismo, así que no podemos comentar nada". Y Movistar Plus+ desliza que ellos nunca hablan sobre "especulaciones de este tipo".

Lo cierto es que las OTT (plataformas que emiten contenidos a través de Internet) últimamente están apostando por aglutinar la mayor cantidad de marcas bajo un único paraguas. El mejor ejemplo es Movistar, que ha integrado en su catálogo a Netflix (en 2018), Disney+ (2020) o Prime Video (2021), así como algunas nacionales (como ATRESplayer Premium o Mitele) y otras especializadas en sectores concretos, como DAZN en el ámbito deportivo. La última incorporación que han anunciado ha sido Apple TV+, que está disponible desde el pasado 20 de diciembre.

Hasta ahora lo habitual era que las propias compañías llegaran a acuerdos entre sí para integrar los contenidos. La propia Filmin puede contratarse, sin ir más lejos, desde Vodafone, y precisamente esta semana diversos medios publicaron que a partir del próximo 28 de enero estaría disponible también en Movistar Plus+. Pero lo cierto es que no es así, y ni siquiera hay negociaciones abiertas sobre este tema. Se trató, presuntamente, de un error de comunicación interna de la propia Movistar.

De esta manera, la operación de Filmin sería directamente una venta, y no precisamente barata. A su favor, hay que decir que la OTT se ha erigido como la plataforma cinéfila por excelencia gracias a un catálogo que aglutina cine de autor e independiente con películas y series clásicas que no pueden verse en ningún otro lugar. Una filosofía que ha conseguido que, dentro del gran público, Filmin se relacione directamente con un contenido de la más alta calidad.

Quizás su gran 'debe' sea que no tiene muchos contenidos de producción propia, pero esa nunca ha sido la apuesta de la compañía. En cualquier caso, con un modelo de negocio tan de nicho, lo cierto es que en los últimos años han conseguido ser rentables después de estar una década perdiendo dinero.

Según Expansión, la compañía se anotó en 2023 unos ingresos de 22,6 millones de euros (un 14% más que el año anterior) y un beneficio neto de 1,5 millones (un 327% más). Ese año crecieron en número de suscriptores "a doble dígito", de acuerdo con la propia empresa, que pronosticaba que seguirían creciendo en usuarios y resultados en los próximos años.

Hay que decir, no obstante, que en los últimos años ha habido vaivenes en esas cifras. En 2022 Filmin registró una facturación de 19,72 millones de euros y un beneficio de casi 327.000 euros, lo que supuso una caída del 87% respecto al año anterior. Precisamente el 2021 sí fue un gran año para la compañía, porque aunque tuvo una facturación muy parecida (19,3 millones de euros) su beneficio neto se disparó hasta los 2,5 millones, prácticamente el doble que en 2020.

El reto de mantener la identidad

Actualmente Filmin cuenta con unos 15.000 títulos en su catálogo, y aunque no hay cifras oficiales de suscriptores se estima que su cuota de mercado en España es de entre el 5% y el 10%. A finales de noviembre de 2020, Nazca Capital se convirtió en el accionista mayoritario de la plataforma, en sustitución de Metropolitan Filmexport y Vértigo Films. En ese momento, el fondo de Seaya también entró en la compañía.

Por poner en contexto, Nazca es una sociedad gestora de fondos de capital privado especializada en medianas empresas. Por su parte, Seaya es una firma dedicada a invertir en empresas en su fase inicial para apoyarles en su expansión y crecimiento internacional. También han invertido, entre otras, en Cabify o Glovo. Lo primero que hicieron los dos fondos una vez se confirmó su llegada fue ampliar su capital de inversión a 20 millones.

Sin embargo, durante todo este tiempo Filmin ha seguido en manos de sus tres socios fundadores: los mallorquines Jaume Ripoll y José Antonio Luna y el catalán Juan Carlos Tous. Aunque sobre el papel manejan apenas el 16% de la compañía, en su momento explicaron que Nazca y Seaya querían que ellos siguieran al frente para controlar la línea editorial y asegurar que la identidad de Filmin no cambiaba. Está por ver si, en caso de confirmarse una nueva venta, el nuevo comprador tiene la misma idea.

A lo largo de los años, Filmin ha recibido algunas ayudas públicas de instituciones como la Generalitat de Cataluña, que ha querido impulsar a las plataformas que apostaran por el catalán. Pero eso no impidió que entrara en conflicto con el Gobierno catalán en 2023, cuando la Generalitat preparaba una nueva Ley de Comunicación Audiovisual y pretendía tener un mayor control sobre los contenidos de Filmin, tal y cómo explicó El Confidencial.