La aseguradora DKV dejará de prestar asistencia sanitaria a cerca de 200.000 funcionarios y sus familiares tras su renuncia en el último momento a seguir participando en el concierto de Muface, lo que obligará a estos clientes a buscar una solución. A pesar de que el Gobierno elevó a más de 4.800 millones el presupuesto de la licitación de Muface para los años 2025, 2026 y 2027, lo que supone un aumento de la prima media del 41,2 %, DKV ha sido la única aseguradora que ha rechazado volver a presentarse.

Por el contrario, SegurCaixa Adeslas y Asisa, que hasta ahora venían prestando el servicio junto a DKV, sí se han sumado al nuevo concierto y seguirán prestando la asistencia sanitaria a los funcionarios y sus familiares que así lo decidan. En cuanto a los cerca de 200.000 mutualistas que tendrían en este momento la cobertura sanitaria con DKV Seguros, tendrán un plazo para elegir otra de las entidades concertadas, es decir Adeslas o Asisa, o bien optar por el servicio público de salud.

Fuentes próximas a Muface han explicado a EFE que a principios de año cerca de un 10 % de los mutualistas optaron ya por acogerse al servicio público de salud a la vista de las dudas sobre la continuidad del sistema. 

Por otro lado, hoy SegurCaixa Adeslas, integrada en el Grupo Mutua Madrileña y participada por CaixaBank, ha comunicado que obtuvo un beneficio neto de 428,4 millones de euros en 2024, un 12,6 % menos que un año antes, por las pérdidas derivadas del concierto de Muface. Solo en 2024, la prestación del servicio sanitario a los funcionarios por parte de Adeslas supuso a la compañía unas pérdidas de 126 millones de euros, que superan los números rojos de 2023, cuando ascendieron a 77 millones.

"No era sostenible"

De los 126 millones de pérdidas por el servicio sanitario a los funcionarios, el grueso, unos 90 millones, corresponde al concierto de Muface y los otros 30 millones serían de Isfas, el Instituto Social de las Fuerzas Armadas que cubre a unas 600 personas. De esta forma, el presidente de Mutua Madrileña, Ignacio Garralda, ha dejado claro en una rueda de prensa que el modelo de Muface, tal y como estaba diseñado hasta ahora, "no era sostenible" y el servicio sanitario privado a los funcionarios era "un lastre".

En cualquier caso, teniendo en cuenta la mejora de las condiciones de Muface, con una subida de la prima media del 41,8 % ha hecho que SegurCaixa Adeslas, al igual que Asisa, hayan decidido volver a sumarse al concierto para los años 2025, 2026 y 2027. Garralda espera que en esta ocasión Adeslas no tenga que anotarse pérdidas en el conjunto de los tres años, pero advierte de que es difícil de predecir y vaticina que posiblemente en el primer año, en 2025, ganen dinero; en 2026 quizá ya no y en 2027 posiblemente incurran en pérdidas.

Aunque ha asegurado que no ha recibido ninguna llamada del Gobierno ni presión para renovar en Muface, reconoce que le hubiera gustado que más aseguradoras se sumaran al nuevo concierto porque sería una señal de normalización. "Hace 20 años había 11 compañías aseguradoras y ahora dos, algo no está bien diseñado", ha dicho antes de añadir que "lo ideal es que se presenten cuatro, cinco o seis".

"Una dura realidad"

El presidente de Mutua ha explicado que fue Adeslas, con su rigor profesional, quien decidió volver a participar y ha insistido en que la compañía ha sido "transparente y consistente" durante todo el proceso: avisó de las pérdidas que estaba incurriendo, rechazó las condiciones iniciales y luego logró convencer a la Administración "de la dura realidad".

Volviendo a los resultados de SegurCaixa Adeslas, a pesar de Muface, los ingresos totales de la compañía crecieron un 8,1 % en 2024, hasta 5.286 millones de euros, después de que el número de asegurados aumentara un 1,1 %, hasta 6,28 millones de clientes.