El Banco de España empeora sus estimaciones en lo referente al Índice armonizado de precios al consumo (IAPAC). Frente al 2,1% estimado en diciembre, finalmente la inflación se situará en el 2,5% para 2025 debido principalmente a la aceleración de los precios de la energía, superior a los contemplados tres meses atrás. En su último informe presentado este martes, el organismo que dirige José Luis Escrivá señala que las previsiones actuales no contemplan, por el momento, los efectos en la actividad económica de la "extraordinaria incertidumbre" comercial y geopolítica.
La evolución al alza de los precios energéticos mostró, además de la subida del IVA de la electricidad en enero, el encarecimiento de esta y de los derivados del petróleo, en línea con el aumento del precio del crudo en los mercados internacionales. Por su parte, los precios alimenticios frenaron su desaceleración por el comportamiento alcista de los alimentos frescos y el impacto de la reversión en enero del IVA de los alimentos esenciales. Además, la extensión hasta junio de 2025 de las medidas de apoyo al transporte público contrarresta ligeramente la revisión al alza de la inflación en 2025
No obstante, se mantienen las previsiones de la inflación para 2026 y 2027. Descenderá al 1,7% en 2026 para aumentar al 2,4% en 2027. El crecimiento de 2027 se debe, nuevamente, al avance del componente energético como consecuencia de la introducción prevista de un nuevo régimen de comercio de derechos de emisión en la Unión Europea (EU ETS2). La entrada en vigor del ETS 2 supondrá la extensión del sistema de pago por emisiones de gases contaminantes a sectores como la movilidad y a los hogares. En lo referente a la inflación subyacente, el organismo de José Luis Escrivá plantea una “suave desaceleración”, desde el 2,8% registrado en 2024 hasta el 2,2% en 2025, el 2% en 2026 y el 1,9% en 2027.
Sin embargo, el organismo supervisor destaca que estas proyecciones están sometidas a "una extraordinaria incertidumbre y presentan riesgos a la baja en términos de crecimiento económico". Las previsiones no incorporan en este trimestre el impacto adverso sobre la actividad económica que tendrán los mayores niveles de tensión geopolítica y el incremento de los aranceles por parte de Estados Unidos a las importaciones procedentes de México, Canadá y la UE. Asimismo, no se incluye la posibilidad contemplada por la UE de flexibilizar las reglas fiscales a las que están sometidos los Estados miembros con el propósito de incrementar, de manera apreciable, el gasto público en defensa.
En lo referente al crecimiento económico, la autoridad bancaria ha estimado un crecimiento del 2,7% del PIB para 2025, lo que supone una mejora de dos décimas con respecto a lo que predijo en diciembre. Asimismo, mantiene su previsión del 1,9% y del 1,7% para 2026 y 2027, respectivamente.
Por último, el Banco de España advierte que seguirá monitorizando hasta qué punto la actividad económica española podrá mantener un ritmo de crecimiento sensiblemente superior al de dos de sus principales socios comerciales (Francia y Alemania), así como la evolución de la inversión privada, que muestra una senda de recuperación particularmente débil.
Te puede interesar
Lo más visto
- 1 El conductor que llevó a Pano a Ferraz cancela en Justicia sus antecedentes penales
- 2 Hacienda te 'devuelve' hasta 3.000 euros por tu hipoteca
- 3 Ana Garcés, Jana en La Promesa, sobre su salida de la serie
- 4 Jesús Cintora contra la desinformación en La 1
- 5 Roca Rey se pronuncia alto y claro sobre Victoria Federica
- 6 Antena 3 avisa sobre Sueños de libertad y su destino inminente
- 7 Mercadona lanza un nuevo labial inspirado en un producto viral
- 8 Últimas noticias de Política Internacional | El Independiente
- 9 Aramburu: "El bocazas de Trump podría ser beneficioso para Europa"