Tras un año inédito para los mercados, las bolsas miran a 2021 con mucho optimismo y todas las esperanzas para la recuperación económica están depositadas en el final de la crisis sanitaria, que no llegará hasta que la vacunación se extienda a la mayoría de la población. Es por eso que el mayor riesgo al que pueden enfrentarse este año las bolsas es que el ritmo de vacunación sea más lento de lo esperado o que surjan nuevas cepas del Covid-19 inmunes a las vacunas que se están desarrollando, pues ambas circunstancias no harían más que ralentizar la mejora de la economía.

Las bolsas vivieron un 2020 complicado, especialmente en España, donde el índice de referencia, el Ibex 35, cerró con un desplome del 15% el año en el que registró la mayor caída de su historia en un solo día. Los inversores afrontan 2021 con mayor optimismo, pero con cautela.

"Probablemente, el mayor riesgo es una decepción sobre el ritmo de la vacunación o una nueva cepa del virus que no se pueda controlar con la vacuna", explica Terry Ewing, responsable de Renta Variable de Mediolanum International Funds, en una entrevista con El Independiente.

En su opinión, las expectativas de una vacunación exitosa, junto con los ingentes paquetes de estímulo fiscal puestos en marcha (y prometidos) por los distintos gobiernos y bancos centrales, apuntalarán la recuperación económica, si bien existe el riesgo de que las cosas no salgan como está previsto.

El ritmo de vacunación es un punto clave en el que confían los inversores. "La perspectiva de alcanzar la inmunidad colectiva ya a mediados de 2021 en los países que son más rápidos en vacunar a sus poblaciones está incitando a los inversores a mirar más allá de la pandemia para la normalización económica", apunta desde Julius Baer su experto Yves Bonzon.

Más allá del ritmo de vacunación, los ojos están también puestos en la posible aparición de nuevas cepas del Covid-19 que sean imposibles de controlar a través de las vacunas. Un escenario, de momento, improbable para los analistas.

"El mayor riesgo para una recuperación será que aparezca una cepa del virus inmune a las vacunas, algo improbable teniendo en cuenta que hay seis tipos diferentes de las mismas, o que los progresos en la vacunación sean lentos y alcancen a un porcentaje pequeño de la población, con lo que estaríamos en dificultades el próximo otoño", apuntan, por su parte, desde Portcolom Agencia de Valores.

Hace unos días, era BBVA Research el que advertía de que el mejor impulso para la actividad económica es una campaña de vacunación efectiva, rápida y masiva, pues reduciría la incertidumbre en relación con la crisis sanitaria, al tiempo que permitiría flexibilizar las restricciones a la movilidad de trabajadores y hogares y la apertura de comercios en el sector servicios.

Sectores cíclicos

En este contexto, y contando con que la recuperación no se vea frustrada por estos riesgos, saldrán ganadores en bolsa los sectores cíclicos, que son aquellos que se mueven al ritmo de la evolución de las economías. Este grupo de empresas, en el que se encuentran las industrias manufactureras, la construcción, las inmobiliarias, el sector financiero o el turismo, se beneficiará de la recuperación de la actividad.

El experto de la gestora irlandesa del grupo Mediolanum destaca también que las compañías con "mejores notas" en relación con los criterios ESG (medioambientales, sociales y de gobernanza) serán una apuesta segura para este año.

"Aquellas compañías que sean suficientemente inteligentes para cambiar su arquitectura estarán en el camino para una valoración más alta", apunta Ewing. En este sentido, destaca que muchas compañías energéticas están mejorando su "huella ESG", por lo que también tienen potencial.

El experto de Mediolanum International Funds explica que también hay potencial en el sector financiero y, particularmente, en la banca. Pese a que el entorno de tipos negativos se mantendrá "durante mucho tiempo", el analista valora que, "con el tiempo, los márgenes netos empezarán a elevarse y los bancos están muy bien capitalizados".