El Consejo de Ministros extraordinario de este domingo ha aprobado un nuevo estado de alarma para toda España que se prolongará durante 15 días, con intención de renovarlo durante seis meses hasta abril con una sola votación en el Congreso. El decreto impone un toque de queda obligatorio en toda España, excepto las Islas Canarias, de 23.00 a 06.00 horas, aunque faculta a las Comunidades Autónomas a adelantarlo o retrasarlo una hora.

Así, Cataluña ya ha avanzado su intención de adelantar la hora del toque de queda a las 22.00 horas, igual que Castilla y León. En la Comunidad Valenciana, de momento, se aplica desde la medianoche.

El decreto fija mínimos y deja en manos de las autonomías tomar otras decisiones, e incluso permite prohibir los desplazamientos entre comunidades autónomas si así se establece.

No se prevé intención de volver al confinamiento total de marzo, pero la gran mayoría de las autonomías pedían en estas semanas un confinamiento nocturno para reducir los contagios en fiestas y reuniones sociales.

Queda por establecer qué apoyos obtendrá el Gobierno para una prórroga de seis meses del estado de alarma. El Partido Popular sigue reclamando una ley que no obligue a echar mano del artículo 116 de la Constitución Española. Los partidos nacionalistas exigieron contraprestaciones al Ejecutivo en las prórrogas de abril y mayo, aunque en esta ocasión han sido tanto País Vasco como Cataluña quienes han reclamado un estado de alarma con mando autonómico.