"Bienvenido a Casa Grande, el hotel más lujoso de negocios en La Paz". Así se promociona en su web el cinco estrellas en el que se hospedó Pablo Iglesias durante su reciente viaje a Bolivia para asistir a la toma de posesión del nuevo presidente del país suramericano, Luis Arce. El vicepresidente segundo ocupó una de las 65 habitaciones de este establecimiento, de estética "ultramoderna" y con una terraza que presume de brindar unas panorámicas "espectaculares" y las "mejores" vistas de las puestas de sol en la ciudad.

En respuesta a una solicitud de información tramitada a través del Portal de la Transparencia, el subsecretario de Derechos Sociales y Agenda 2030 eludió el pasado 25 de noviembre detallar en qué hotel había pernoctado Iglesias y, desglosado por conceptos, cuánto había costado su viaje y el de su séquito a la capital boliviana. "Los detalles logísticos del viaje (transporte, hotel, comida, transfer, taxi, número de acompañantes...) se ajustaron a lo establecido por Casa Real para toda la delegación", despachó Joseba Miren García Celada.

El alto cargo tan sólo dio respuesta a una de las cuestiones que se planteaban en la petición: los cargos de las personas que acompañaron al ministro en dicho viaje oficial. Fueron su director adjunto de gabinete, el jefe de la Secretaría General de la Vicepresidencia y un integrante de su equipo de Comunicación, concretamente el fotógrafo que inmortalizó su encuentro con varios mandatarios suramericanos que asistieron también a la toma de posesión del ex ministro de Evo Morales y candidato del Movimiento al Socialismo.

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La contestación de Derechos Sociales y Agenda 2030 contrasta con la ofrecida por el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, destinataria de idéntica petición de información. Como máxima responsable de la diplomacia española, Arancha González Laya acompañó al rey Felipe VI en el acto de La Paz, celebrado el pasado 8 de noviembre en la Asamblea Legislativa Plurinacional.

Asuntos Exteriores no ha puesto reparos a ofrecer los datos que el Ministerio de Iglesias ha evitado facilitar

En un ejercicio de transparencia, el director del gabinete de la ministra ha cifrado en 3.360,19 dólares (unos 2.770 euros al cambio actual) el coste del viaje de la delegación de Asuntos Exteriores, integrada por seis personas. El alojamiento importó 1.715 euros, el transporte 975 euros y el "consumo" 82 euros, según se detalla.

En concreto, las personas vinculadas al Ministerio de Asuntos Exteriores que acompañaron a González Laya en este desplazamiento fueron su jefe de gabinete; la directora general de Comunicación, Diplomacia Pública y Redes; la subdirectora general de Viajes y Visitas Oficiales; la consejera técnica de la Subdirección General de Países Andinos y un asesor de la Oficina de Información Diplomática.

Alzado del Hotel Casa Grande de La Paz (Bolivia).

La respuesta también incluye el nombre del hotel -el Casa Grande de La Paz- en el que se alojó la titular de Asuntos Exteriores. Proyectado en julio de 2011 por el arquitecto boliviano Ramiro Muñoz Moyano y terminado de construir en febrero de 2014, el establecimiento consta de ocho plantas -en las seis superiores se distribuyen las habitaciones, incluida la suite presidencial- y se levanta sobre una superficie de 2.550 metros cuadrados. Fue una de las 194 obras seleccionadas para participar en la X Bienal Iberoamericana de Arquitectura y Urbanismo (BIAU), celebrada en Sao Paulo (Brasil) en 2016 y en la que se premió al arquitecto portugués Eduardo Souto de Moura.

No sólo González Laya. Fue también el hotel en el que pernoctó el vicepresidente segundo, según ha podido confirmar El Independiente después de que el departamento que dirige Pablo Iglesias haya evitado ofrecer éste y otros detalles del viaje. La contestación ya ha sido recurrida ante el Consejo de Transparencia y Buen Gobierno, que, tras solicitar alegaciones a Derechos Sociales y Agenda 2030 y estudiar el caso, tendrá que dictar resolución en las próximas semanas instando al Ministerio concernido a ofrecer la información en el plazo de diez días hábiles o desestimando la pretensión del solicitante.

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El viaje a La Paz, el primero realizado por Pablo Iglesias acompañando al rey Felipe VI, no estuvo exento de polémica. Pese a haber sido invitado "a título personal" por el máximo mandatario boliviano, el vicepresidente segundo viajó en el avión de la delegación española, lo que -como informó este diario– causó malestar en Zarzuela. A esa incomodidad se sumó el rechazo del Ministerio de Exteriores a la agenda paralela de Iglesias y al temor de que su presencia "tapara" la agenda oficial del Gobierno.

Frente a esta versión, desde la Vicepresidencia Segunda aseguran que fue el propio Pedro Sánchez el que le propuso a Pablo Iglesias que acudiera a Bolivia "en su lugar". La invitación de Arce llegó a la Presidencia del Gobierno el mismo día en que el jefe del Ejecutivo e Iglesias presentaron el proyecto de Presupuestos Generales del Estado en La Moncloa.