José Manuel García-Margallo, que convirtió la reclamación de la soberanía de Gibraltar en uno de los ejes de su ejecutoria como ministro de Asuntos Exteriores, ve con profundo estupor un acuerdo sobre el futuro del Peñón que supone -a su juicio- enterrar "por los siglos de los siglos" dicha reivindicación. El pacto rubricado por Arancha González Laya, pendiente de ratificación por la Unión Europea, supone no sólo "no echar al okupa sino pagarle además el gas y la electricidad".

Con este acuerdo, la colonia no va a tener ningún aliciente para forzar en el futuro una cosoberanía y mucho menos un cambio de soberanía, aduce. En su opinión, supone "romper con todo lo que ha hecho y dicho España hasta el momento. Es el principio de autodeterminación" de Gibraltar.

Al ex ministro de Exteriores le ha pillado la difusión del contenido del acuerdo, revelado por El País, corrigiendo las galeradas de su último libro, titulado, precisamente, Gibraltar, la segunda rendición, que ha coescrito con el que fuera secretario de Estado para la Unión Europea Fernando Eguidazu. Es un repaso histórico del Peñón, prolijo como suelen ser sus trabajos.

Las Naciones Unidas, recuerda García-Margallo, califican a Gibraltar de territorio colonial y aboga por la descolonización, al tiempo que aplica el principio de integridad territorial de los estados. Pero si se materializa este acuerdo "ya no hay quien lo mueva". Recuerda que el pacto, por ejemplo, supone de facto la entrada de Gibraltar al Espacio Schengen, una ventaja que antes no tenían.

Además, teme que el Peñón siga siendo un paraíso offshore aunque asuma el sistema aduanero europeo, el IVA y los impuestos especiales. "Si es verdad que tienen que someterse a las mismas reglas -señala el ex ministro-, eso no afecta al impuesto de sociedades", que no está armonizado en Europa por negativa de Irlanda.

Alerta sobre Cataluña

En cuanto a la presencia de policía española en el control de aduanas del puerto y aeropuerto de Gibraltar, aunque admite que "es un avance" no duda en calificarlo como "el chocolate del loro". Así, explica que el aeropuerto de Basilea tiene una especie de doble nacionalidad -suiza y francesa- y en su consejo también hay alemanes, y "eso no significa nada".

En definitiva, cree que el acuerdo ha hecho dejación de un principio básico, esto es, "el concepto de integridad territorial y si eso no es importante, qué más da todo". Al hilo de esta reflexión, alerta sobre las declaraciones de la ministra en el sentido de que se trata de crear una "zona de prosperidad" en el Campo de Gibraltar porque ese argumento "serviría también para Cataluña".

También considera "intolerable" que González Laya no informara a los portavoces de Exteriores de los grupos parlamentarios, que se enteraron por la prensa, sobre todo por tratarse de una "política de Estado que se hacía por consenso". Lo ha hecho esta tarde por videoconferencia.

España no había dado a conocer todos los detalles del acuerdo alcanzado 'in extremis' el pasado 31 de diciembre con el Reino Unido acerca de las relaciones con el Peñón una vez materializado el Brexit y que la ministra Arancha González Laya calificó de "histórico". Cuando se hizo público el último día de 2020, la titular de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación destacó que España sería "la responsable de la aplicación de Schengen en Gibraltar" y que se levantaría la verja.

Vox dice que España "está renunciando a la soberanía y entregando a Gibraltar el control de acceso a Gibraltar"

Los pormenores del pacto se desarrollan en un documento de ocho páginas -estructurados en 25 puntos y tres anexos- que ha adelantado El País. En una videoconferencia celebrada en la tarde de de este lunes, los grupos de la oposición han pedido explicaciones a González Laya por haberse enterado por la prensa y no haber sido informados por el Gobierno de un asunto de enorme calado. La ministra se ha desmarcado de la filtración y ha respondido que el documento podría haberlo facilitado cualquier de los 27 países a los que se ha facilitado el acuerdo.

"El contenido es muy preocupante porque es una cesión de soberanía por parte de España", interpreta el portavoz parlamentario de Vox, Iván Espinosa de los Monteros. Éste ha indicado que, aunque la ministra ha tratado de hacer hincapié durante la reunión que el acuerdo incluye la proclamación de que ninguno de los dos países (España y Reino Unido) renuncian a la soberanía,. "una cosa es lo que se dice y otra lo que de facto se hace".

Espinosa de los Monteros insiste en que el Ejecutivo de coalición "está renunciando a la soberanía" y "entregando a Gibraltar el control de acceso a Gibraltar". "Una vez que entras en Gibraltar, si quitas la Verja estás en espacio Schengen. Es una gran ironía, porque Gibraltar no era Schengen cuando el Reino Unido era parte de la Unión Europea y ahora que el Reino Unido se ha ido es una excepción al territorio Schengen. Es algo incomprensible", añade.

El portavoz de Vox en el Congreso advierte de que "ni la Policía Nacional ni la Guardia Civil van a tener acceso al control por vía portuaria ni aeroportuaria", al tiempo que asegura el pacto con Reino Unido "es muy lesivo para los intereses" del país y que España "no ha ganado nada". "La demostración es que el propio acuerdo prevé que se pueda someter a revisión dentro de los próximos cuatro años, pero Picardo [ministro principal de Gibraltar] ya ha manifestado que no tiene intención de modificar nada. Lógico, porque el acuerdo beneficia a los gibraltareños y al Reino Unido. ¿Qué ha ganado España? Absolutamente nada", enfatiza.

Ciudadanos dice que quedan "muchos flecos", como los relativos a los impuestos especiales al tabaco y alcohol

Espinosa de los Monteros considera que los términos pactados por el Gobierno de Pedro Sánchez con Londres constituyen tal "aberración" que antiguos ministros socialistas estén "absolutamente escandalizados". Por todo ello, ha anunciado que su grupo solicitará la comparecencia urgente de González Laya en el Congreso para "someterla a las preguntas pertinentes", "denunciar la pérdida de soberanía" y que explique cómo afecta "a los intereses de España".

Tras censurar que la prensa haya tenido acceso al acuerdo antes que los representantes de los ciudadanos, Ciudadanos se valora como una "buena noticia" que Gibraltar se incorpore a Schengen "bajo supervisión española" pensando en el libre movimiento de los trabajadores españoles que se desplazan cada día al Peñón del Campo de Gibraltar, si bien consideran que quedan "muchos flecos" que el Gobierno no ha aclarado aún.

En este sentido, la portavoz de Cs en la Comisión de Exteriores, Marta Martín, exige que se clarifiquen aspectos clave para dar seguridad a la comarca, como los relativos a los impuestos especiales al tabaco o el alcohol para evitar competencia desleal del Peñón con el Campo de Gibraltar. "También nos gustaría saber más sobre las garantías de cumplimiento por parte de las autoridades de Gibraltar, sobre todo en materia ambiental y fiscal, puesto que en repetidas ocasiones no se ha cumplido con la legislación vigente sin que ello acarreara consecuencias", expone.

Martín ha dicho que su formación va a estar "vigilante" para garantizar que el Ejecutivo de Pedro Sánchez "no renuncia a las aspiraciones de soberanía que forman parte del consenso de la política exterior española y que Ciudadanos apoya, por ejemplo, a la hora de garantizar una explotación conjunta del aeropuerto que se ha construido parcialmente en el istmo y, por tanto, está en territorio español".