La borrasca Filomena ha asolado no sólo a la capital de España, sino a numerosos pueblos y ciudades de la Comunidad de Madrid que han visto cómo se quedaban incomunicados durante horas y días a causa de un temporal de nieve y hielo que aún causa estragos en muchos puntos de la región. Desde el pasado domingo, el PP, de la mano del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ya ha venido deslizando su intención de elevar una solicitud a Moncloa para que apruebe la declaración de zona catastrófica de la capital, una iniciativa a la que se han unido este miércoles todos los alcaldes del PP de las localidades madrileñas ante las reticencias que mostró en un primer momento el Gobierno a aprobar este estatus para Madrid.

Pero no están sólos. El PSOE de Madrid, apoyados por Unidas Podemos allá donde gobiernan juntos, ha impulsado una moción común que presentarán todos los grupos socialistas en los ayuntamientos de la región, en la que también solicitan al Gobierno la declaración de zona de emergencia en todos sus municipios, previo estudio "riguroso" de los "daños causados por el temporal", según el documento al que ha tenido acceso El Independiente.

La moción que presentó ayer Fuenlabrada, primer ayuntamiento socialista en anunciar que solicitaría la declaración de zona catastrófica al Gobierno central, será replicada no sólo por todos los municipios gobernados por el PSOE en la región, sino también por los portavoces locales que elevarán su apoyo al regidor correspondiente.

En el modelo común expedido por el PSOE a todos los grupos municipales se afirma que las consecuencias de la borrasca Filomena "han superado todas las estimaciones" y ha provocado "una gran cantidad de daños e impactos materiales cuya atención supera los medios disponibles". Se escudan en la Ley 17/2015, de 9 de julio del Sistema Nacional de Protección Civil -misma ley en la que ha venido amparándose el PP en los últimos días- para solicitar al Ejecutivo la declaración de zona catastrófica, "que permitirá obtener un catálogo de recursos para el municipio".

Las fuentes socialistas consultadas explican que lo importante en este asunto es convertir el desastre en una "causa común" en que "todos debemos arrimar el hombro" y no una afrenta "partidista" que alimente el "conflicto político", por lo que se unirán a los ayuntamientos del PP en la demanda que el Ejecutivo pasará a valorar en los próximos días.

La polémica sobre la declaración de Madrid como zona catastrófica comenzó cuando, en un primer momento, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, se opuso a la iniciativa cuando José Luis Martínez-Almeida sólo había deslizado la posibilidad de elevar la petición al Gobierno el pasado domingo, todavía sin contar con la evaluación de daños pertinente.

Ese rechazo inicial fue criticado por el consistorio, por el Gobierno de la Comunidad de Madrid y por el propio líder del PP, Pablo Casado, al considerar que el Gobierno ya había cerrado esa puerta sin un estudio de daños, mientras "gasta enloquecidamente" en otras cuestiones. Más tarde, el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, matizó las palabras de Marlaska y avanzó que el Gobierno estudiará conceder este estatus a la capital y al resto de ayuntamientos que lo soliciten. "Ya estamos empezando a evaluar los daños que se han causado, pero esa evaluación no puede terminar hasta que concluya la situación de alerta", dijo.

Con la petición expresa del PSOE madrileño, se da prácticamente por descontado que Moncloa abrirá el grifo de las ayudas a los territorios afectados por el temporal, una petición a la que también valora unirse el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page. El Ayuntamiento de Madrid ya ha anunciado que mañana presentará la petición para declarar la ciudad como zona afectada gravemente por una emergencia, según ha anunciado el regidor madrileño en su cuenta de Twitter. "Se han constatado graves daños que ascienden a cientos de millones de euros", añadía.

PSOE y Podemos piden a Ayuso un fondo extraordinario

Más allá de que el Gobierno dé luz verde a la iniciativa y se abra el canal de ayudas a empresas y particulares previsto en el estatus de zona de emergencia, los ayuntamientos del PSOE se han unido también para exigir a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, la creación de un Fondo Regional Extraordinario para los municipios que se han visto afectados por la fuerte borrasca.

A su juicio, el hecho de que Moncloa apruebe este "mecanismo extraordinario de ayuda" no exime a las comunidades autónomas "de la obligación de atención y colaboración con sus municipios". Y recuerdan que la Comunidad de Madrid ya aprobó en septiembre de 2019 partidas extraordinarias para ayudas a las localidades afectadas por la gota fría DANA.