Ellos siempre han bebido más. El alcohol ha sido históricamente un acompañante más frecuente en los tiempos de ocio y socialización de los hombres que en el de las mujeres. Hoy lo sigue siendo, aunque en menor medida, en el conjunto de la sociedad vasca. Sin embargo, entre los más jóvenes esa tendencia ha cambiado. Los últimos datos revelan que entre la población de entre 15 a 24 años, al menos en Euskadi, -una de las regiones europeas donde la tasa de consumo de alcohol es más elevada-, ya no son ellos quienes más beben sino que los índices de ingesta “de alto riesgo” de alcohol es ya superior en mujeres.

El reciente informe ‘Panorama de Salud 2021’ publicado por el Instituto vasco de Estadística (Eustat) muestra que el consumo considera de “alto riesgo” entre los más jóvenes alcanza el 11,9% entre los varones por el 12,4% de las mujeres. Este nivel de consumo de las jóvenes supera de modo amplio al de las mujeres de más edad, llegando a más que triplicar el que se detecta en la generación de sus abuelas, donde el porcentaje apenas es del 3,5%.

En esta franja de edad es la única en la que las mujeres superan a los hombres en la intensidad del consumo de alcohol. No es donde se producen los porcentajes más altos. Así, entre el colectivo de entre los 25 a 44 años el porcentaje es algo menor, del 11,8%, a dos puntos del de los hombres, con un 13,6% de consumidores de “alto riesgo”. En el segmento de población de entre 45 a 64 años los hombres consumen en un porcentaje mucho mayor, del 21,4%. También en esa edad es donde se detectan los porcentajes de mujeres con mayores cuotas de ingesta de riesgo, el 13,4%.

Más formación, más alcohol

En términos generales son los hombres los que consumen con mayor asiduidad alcohol, lo hace el 17% frente al 11% de las mujeres. La diferencia es de más del doble a partir de los 65 años, con un consumo de riesgo en uno de cada cuatro varones por sólo una de cada diez mujeres.

El informe publicado ahora por las autoridades vascas revela que la probabilidad de caer en un consumo excesivo de alcohol es más alta entre la población con una mejor posición socioeconómica, con casos en cerca del 20% de este colectivo social. También es más habitual encontrar ingestas de riesgo entre la población con mayor formación. Así, en Euskadi el consumo de alto riesgo entre quienes tienen estudios primarios o carecen de ellos se sitúa en el 9% frente al 17% de casos detectados entre el colectivo con formación universitaria.

El Plan de Adicciones 2017-2021 del Gobierno vasco ya alerta del riesgo que supone el incremento de casos de consumo intensivo y en particular del “cambio de patrones” en el consumo de alcohol que se está produciendo entre los jóvenes. Subraya que además de encabezar las tasas en Europa, los jóvenes vascos también lo hacen en otro tipo de adicciones como el tabaco y el cannabis”. Destaca que entre estos sectores de la población se continúa viendo “una baja percepción de riesgo” en su consumo.

Precisamente en lo referente al tabaco, el comportamiento de los jóvenes ha sido el inverso al del alcohol. En los últimos años su consumo ha caído y lo ha hecho de modo acentuado entre las mujeres mientras que entre los hombres ha aumentado. Las mujeres de entre 15 a 24 años en 2013 fumaban en un 14,6% de los casos y cinco años más tarde ese porcentaje cae hasta el 9,5%. El comportamiento de las mujeres ha sido similar en todas las franjas de edad a excepción de las mujeres de entre 65 y 74 años, en donde se ha duplicado el porcentaje de fumadoras, hasta alcanzar el 8,6%. En el caso de los hombres los descensos entre 2013 y 2018 se han registrado en todas las edades, pese a que tienen niveles de tabaquismo más altos que las mujeres.  

Un 12% con sobrepeso

En este caso, la influencia del nivel socioeconómico es el inverso al del alcohol. Mientras en las situaciones más acomodadas el porcentaje de fumadores apenas ronda ya el 12%, entre los sectores más desfavorecidos se dispara al 30%.

El estudio sobre salud en la población vasca también aborda la situación de la obesidad en Euskadi. Recuerda que las personas con sobrepeso tienen un mayor riesgo de desarrollar problemas de hipertensión, diabetes o enfermedades degenerativas articulares. Los últimos datos mostrarían que el 12,5% de los mayores de 15 años tienen sobrepeso en el País Vasco. Lo hace prácticamente en niveles muy similares entre hombres y mujeres, con un 13,7% y un 11,4% respectivamente.

En los últimos años la población con problemas de obesidad ha descendido en algunas franjas de edad y ha aumentado en otras. En el caso de los hombres de entre 65 a 74 años el incremento en los últimos años es del 8% y de más del doble, el 17%, entre las mujeres de entre 25 a 44 años.