Las compañías de telecomunicaciones comienzan a rendir cuentas del primer resultado y lo hacen con una noticia que deja preocupación en el sector. Orange España ha presentado este jueves los resultados pertenecientes al primer trimestre del año con unos ingresos inferiores a los del mismo período del año anterior.

En concreto, la teleco gala ha situado sus ingresos en 1.188 millones de euros, un 7,4% menos que el año anterior, en plena guerra del sector por la guerra de precios en las tarifas.

Y las perspectivas tampoco son halagüeñas. El consejero delegado de Orange España, Jean-François Fallacher, ha confirmado en la presentación a los analistas que la empresa no espera resultados positivos en ingresos hasta finales de 2021 o, incluso, principios de 2022. "Hay que ser pacientes para ver los efectos del reposicionamiento de los precios del año pasado".

Respecto al mercado minorista, los datos aún son peores ya que la caída que se computa es del 10%, con un total de 818 millones de euros. Para explicar estos datos, el directivo de Orange ha indicado que se debe a "el impacto de la modificación de los precios de la base de clientes existente en el segundo semestre del año anterior".

No obstante, Orange España ha conseguido incrementar su cartera de clientes. La filial cuenta con 10.000 altas netas en servicios convergentes, 49.000 en fibra y 24.000 en contratos móviles excluyendo M2M nuevas.

Por modalidades de ingresos, Orange ha facturado 469 millones por los paquetes convergentes, eguidos por los servicios móviles por los que Orange España ha ingresado 231 millones de euros, 13,6% menos, y los servicios fijos, que le han reportado un total de 116 millones de euros (-6,7%).