Inditex ha comunicado a los sindicatos el cierre de otras 56 tiendas entre los meses de junio, julio y agosto. La compañía reubicará a los 475 empleados afectados en otros establecimientos del gigante textil, que hace un año comenzó una proceso de transformación digital por el que está concentrando sus tiendas en locales más grandes y tecnológicamente preparados.

Andalucía será la Comunidad donde más cierres se registren este verano, con 19 clausuras y 194 empleados afectados. En Madrid se absorberán ocho establecimientos que emplean a 83 trabajadores, mientras que en Cataluña se echará la persiana a otros ocho locales, donde prestan servicios 44 personas.

A continuación se sitúan por número de cierres Galicia (5), Murcia (4), la Comunidad Valencia (4), Castilla y León (3), el País Vasco (2), Canarias (2) y Aragón (1). Según ha detallado el sindicato CC.OO en un comunicado, seis cierres se harán efectivos antes del 25 de julio; 43 se llevarán a cabo entre el 25 y el 31 de ese mismo mes; y otros siete se dejarán para agosto.

Ante la nueva ronda de clausuras, los representantes sindicales reclaman "que se cumpla rigurosamente el procedimiento pactado, garantizando la reubicación en tiendas cercanas y sin pérdida de horas de contrato, para las 475 personas trabajadoras indefinidas que se ven afectadas por estos cierres".

A nivel de marcas, la absorción de locales afectará a 13 de Oysho; 10 de Stradivarius y otros 10 de Zara Home. Por su parte, se cerrarán nueve tiendas de Massimo Dutti, seis de Pull & Bear y de Zara, además de una de Bershka y otra de Kiddy's Class. Inditex prevé culminar el proceso este mismo año con la absorción de un total de 300 locales en España y entre 1.000 y 1.200 en todo el mundo.

La empresa se comprometió con los representantes de los trabajadores el pasado mes de diciembre a garantizar el empleo de los afectados por las absorciones de tiendas. Pero desde CC.OO recuerdan que "del total de vacantes ofertadas, el 60% se ha ofrecido en la misma provincia, el 44% se ha ofertado con entre 30 y 40 horas semanales de trabajo, y el 19% se ha ofertado en la misma provincia con entre 30 y 40 horas semanales de trabajo".

Desde esta central sindical consideran que las vacantes ofertadas tienen "una insuficiente calidad", especialmente en términos de horas de contrato y proximidad. Eso, entienden, "ha sido la causa principal, junto con las cargas de trabajo y las dificultades de conciliación, de que el 25% de las personas afectadas por los cierres anteriores haya optado por la extinción de su contrato". En caso de optar por este mecanismo, los trabajadores reciben una indemnización acorde a un despido improcedente más una prima en función de su antigüedad en la empresa.