El líder del PSC, Salvador Illa, ha pedido hoy una "reunión urgente" con el Govern de Pere Aragonés para pactar la aprobación de los presupuestos catalanes. El socialista responde así a la enmienda a la totalidad anunciada ayer por la CUP, el socio con el que ERC y Junts sostienen que quieren aprobar los Presupuestos de la Generalitat para 2022.

El Govern tiene cinco días para convencer a los antisistema o buscar un socio alternativo, antes de que el Pleno vote el lunes 22 de noviembre las enmiendas a la totalidad. El PSC es el único partido que no ha anunciado enmienda a la totalidad, su abstención permitiría la tramitación de las cuentas al margen de lo que haga la CUP. Sin embargo, la única oferta que ha lanzado hoy Aragonés no ha sido a los socialistas, sino a Catalunya en Comú (CatEC).

"Pido como representante del primer grupo político del Parlament una reunión urgente con Pere Aragonés para ofrecerle un proyecto de presupuestos de país, no de un bloque" ha anunciado Illa minutos antes de las 9 horas. Un encuentro que el líder socialista ha reclamado celebrar tras la sesión de control al Govern.

De este modo el PSC aumenta la presión sobre la mayoría independentista, que la portavoz socialista, Alicia Romero, dio ayer por rota con la presentación de la enmienda de la CUP. "El bloque de la investidura se ha roto" proclamó Romero y ha repetido hoy Illa para reclamar a ERC y JxCat que dejen de ponerse en manos de los antisistema y sus "presupuestos del no".

Aragonés rechaza la oferta

El presidente catalán, sin embargo, no ha tardado en descartar la oferta de diálogo del PSC. "En política no hay nada gratis, lo que hoy es alargar la mano, mañana puede suponer un precio que es una renuncia a los objetivos con los que me comprometí" en la investidura, ha argumentado Aragonés durante la sesión de control. El republicano dejaba claro así que considera incompatible pactar los presupuestos con el PSC con su "proyecto de país", la independencia.

En política no hay nada gratis" responde Aragonés a Illa

A quién sí ha abierto la puerta Aragonés ha sido a los comunes. "Les propongo que trabajemos esta propuesta de presupuestos, que nos sentemos y hablemos, sin exclusiones a las fuerzas que dieron apoyo a la investidura" ha propuesto Aragonés a la líder de CatEC, Jéssica Albiach. La propia Albiach reclamó ayer esta negociación, asegurando que su oferta de apoyo no es incompatible con la CUP, como sí advierten los socialistas.

"Nosotros nos hemos ofrecido" recordaba hoy la líder morada, quien ha reprochado sin embargo la "falta de ambición" de las cuentas catalanas. Albiach ha insistido en sus demandas: psicólogo y dentista público, más trenes que carreteras y cancelar el proyecto del Hard Rock. Y ha reclamado a Aragonés acabar con el "tufo sociovergente" de sus presupuestos.

Exigencias de la CUP

Entre las exigencias de la CUP para seguir negociando destaca la renuncia explícita a grandes proyectos como el Hard Rock de Salou, los Juegos Olímpicos del Pirineo, o cualquier ampliación de infraestructura o rutas en el Aeropuerto Barcelona-El Prat. Los antisistema exigen además el fin de la normalización de las relaciones de ERC con el PSOE y una nueva subida de impuestos.

Frente a estas reivindicaciones, Illa ha puesto sobre la mesa cinco condiciones para pactar las cuentas: Refuerzo en la sanidad; énfasis en reconstrucción económica, especialmente en política industrial y transformación ecológica; aprovechar los fondos europeos facilitando la información y gestión a los ciudadanos y agentes económicos; garantizar que nadie atrás; y garantizar recursos suficientes para políticas de igualdad.

Illa ha asegurado que se trata de un "ofrecimiento sincero" del que ha reconocido que "no sé si es conveniente para PSC pero es lo más conveniente para Cataluña porque juntos podemos evitar los riesgos que la situación nos presenta".