El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, ha sido citado a declarar como investigado el próximo 18 de enero por el juez de la Audiencia Nacional Joaquín Gadea. Si no se acoge a su derecho a no declarar, se espera que en esa fecha explique al magistrado de refuerzo en el Juzgado Central de Instrucción 6 si conocía la contratación del comisario cuando aún estaba en activo en la Policía para realizar distintos informes sobre de Inteligencia sobre la competencia.

La citación llega medio año después de que el instructor del caso Tándem Manuel García-Castellón, ahora de baja, acordara imputar a Sánchez Galán por presuntos delitos de cohecho activo, contra la intimidad y falsedad en documento mercantil un día después de la solicitud de la Fiscalía Anticorrupción.

El Ministerio Público pidió que Sánchez Galán y los otros tres directivos de la compañía Fernando Becker, Francisco Martínez Córcoles y Rafael Orbegozo declarasen como investigados al considerar que todos conocieron los encargos que se realizaron al comisario -cuando aún estaba en activo en la Policía- entre 2004 y 2017 para espiar supuestamente a empresarios como el presidente de Endesa, Manuel Pizarro, o el de ACS, Florentino Pérez. Becker, expresidente de Iberdrola España, también declarará el día 18 de enero.

En el auto con el que acordó la imputación del presidente de Iberdrola, el juez detalló cómo el exjefe de Seguridad de Iberdrola Antonio Asenjo, que era el enlace con Villarejo, reconoció en su declaración judicial haber manipulado los conceptos de las facturas, ocultando así no solo el objeto de los trabajos encargados al comisario por la compañía, sino también que la empresa contratada era la suya.

Proyecto Arrow sobre Florentino Pérez

Entonces, García-Castellón ya expuso indicios de que entre esos encargos estaría el proyecto ‘Posy’, «que se centró en investigar a Florentino Pérez, presidente de ACS, a fin de conocer cualquier circunstancia que, llegado el caso, pudiera ser utilizada en un escenario de conflicto con Iberdrola, S.A.».

También repasaba otros trabajos como el ‘Proyecto Arrow’, desarrollado entre los años 2004 y 2006, que «tenía por objeto superar los obstáculos que estaban surgiendo en la construcción de una central de ciclo combinado en Arcos de la Frontera (Cádiz)» por la oposición de concejales del Ayuntamiento (al menos una de ella objeto de seguimientos según los informes policiales) y asociaciones ecologistas.

En este caso, como en el de otros proyectos encargados a Cenyt, el juez apreció «voluntad por parte de la compañía de ocultar estos trabajos como parece inferirse del hecho que las facturas correspondientes a los servicios prestados por CENYT no fueron emitidas esta -prestadora del servicio a Iberdrola- sino por otra compañía diferente -Castellana de Seguridad, S.A. (CASESA)».

Otro de los proyectos encargados a Villarejo recogido en la resolución de junio es el denominado ‘Black Board’, desarrollado entre 2004 y 2005 y que, «según informe elaborado por Cenyt fechado el 2 de abril de 2005, tenía por objeto fundamental conocer información de naturaleza sensible referida a actividades de Manuel Pizarro, a la sazón presidente de Endesa, tanto presentes como anteriores, que pudieran incidir en sus actuaciones futuras».

Conversación entre Villarejo, Redondo y Asenjo

Uno de los indicios recabados por la Fiscalía Anticorrupción que el juez destacó en el auto de citación de investigados fue la grabación de una conversación mantenida entre el comisario Villarejo, su socio el abogado Rafael Redondo y el jefe de Seguridad de la compañía, Antonio Asenjo.

Durante ésta, Asenjo preguntó cómo podrían establecer una relación comercial estable. «Este dato vendría a avalar, junto a todos los anteriores, el hecho de que los encargos y relaciones comerciales entre las partes no fueron esporádicos o puntuales sino que tuvieron continuidad en el tiempo, comentándose incluso en la conversación cómo podrían las partes camuflar tal continuidad», expuso el juez.

«Asimismo, hay que tener en cuenta otros encargos que pudieron realizarse por parte de Iberdrola, S.A., a través del investigado Antonio Asenjo, como director de seguridad, con conocimiento de sus superiores, al investigado José Manuel Villarejo Pérez cuando se encontraba en servicio activo en el Cuerpo Nacional de Policía, a algunos de los cuales se vienen a referir las anotaciones recogidas por el propio investigado José Manuel Villarejo en sus agendas incorporadas a la causa a través del reciente y ya citado oficio de la Policía Nacional de 16 de junio de 2021», completa.