El jefe del Ejecutivo ha formalizado esta mañana la salida del Gobierno de Manuel Castells, que será sustituido por Joan Subirats. El relevo se conoció el jueves por la noche, con Pedro Sánchez en Bruselas, por lo que ha comparecido brevemente antes de la reunión del Consejo de Ministros.

Pedro Sánchez ha agradecido a Castells "su trabajo y dedicación". La "admiración que ya sentía por el profesor es aún mayor después de verle trabajar", ha agregado para destacar a continuación su "visión cosmopolita y su amplia experiencia". A pesar de los magros resultados de su paso por la cartera de Universidades, de sus enfrentamientos con el sector y de su práctica desaparición pública desde que llegó la pandemia, Sánchez no ha parado de elogiar a quien fue una de las personas que lo acogió en Estados Unidos cuando le expulsaron del liderazgo del PSOE en 2016.

Es Castells un sociólogo "con un enorme bagaje que ha desarrollado una política de apoyo a la universidad" y aumentado las ayudas y las becas a nuestros jóvenes. Ha destacado "su talante, buen tono, capacidad de diálogo y carácter reflexivo", deseándole suerte en su nueva etapa. El catalán acude este viernes a su último Consejo de Ministros.

Pero ha sido a la hora de glosar la figura del ministro entrante, Joan Subirats, cuando ha mandado un recado al líder de la oposición, Pablo Casado. El nuevo titular de Universidades ejemplifica la "empatía, el diálogo y el respeto para dignificar la política con buena educación, serenidad y responsabilidad de cada uno de nosotros desde las distintas instituciones". Se trataba sin duda de una alusión a la última sesión de control al Gobierno cuando Casado le espetó "¿qué coño tiene que pasar para que usted asuma alguna responsabilidad?".