Concha Andreu es una mujer tremendamente polifacética; bióloga, enóloga y también política. Siempre supo que el vino y su industria, la principal fuente de riqueza de su tierra, serían su vida… pero también el servicio público a pesar de que asegura que sus costumbres familiares apenas han variado, a pesar de su alta responsabilidad.
Andreu es mujer tranquila, de verbo sereno y reposado, lo cual no le impide ser extremadamente incisiva en el análisis de los asuntos más candentes de la actualidad, desde la guerra en Ucrania hasta la crisis interna del PP y la falta de liderazgo que, según explica, ejercía Casado y el abandono de la principal fuerza de la derecha de la posición de centralidad que debería ocupar. Es dura, pero muy clara, a la hora de denunciar el papel de Vox, como una formación política populista que, después del sufrimiento de la pandemia, en ningún caso puede ser bisagra.
Pregunta.- No me queda más remedio que comenzar, señora Andreu, preguntándole por su valoración acerca de la tremenda invasión sufrida por Ucrania a manos del sátrapa Vladimir Putin. Una guerra que hace meses no hubiéramos sospechado y que tenemos aquí l lado, a las puertas de nuestra querida y vieja Europa.
Respuesta.- Siento una gran tristeza. Mi hija, de diecinueve años que estudia aquí en Logroño me acaba de enviar un mensaje preguntándome si vamos a poder acoger refugiados ucranianos. Ese es el sentir de muchas personas. ¿Cómo es posible que un país soberano que tiene su legislación, sus elecciones, su presidente, se vea maltratado, asediado e invadido por otro sólo porque el invasor tiene que demostrar que es más fuerte? Es imposible de entender. Ya sé que hay que guerras en otros países que duran años, pero esta, con esta premeditación y alarde… Europa se ha unido en una piña, sin pensarlo, pero con una idea, que es la de aplicar todas las sanciones necesarias con tal de que esto pare. ¿Cómo es posible que un país se vea abordado de esta manera? Tenemos que frenarlo.
P.- ¿No cree que lo ocurrido es culpa de l UE y de la OTAN por haber hecho la vista gorda en crisis parecidas? Ya en 2006 vimos como se invadía Georgia, sin armas, porque Georgia no tenía fuerza militar y también asistimos a cómo Crimea fue ocupada en 2014. No debería haber supuesto sorpresa alguna que Putin, que es un tipo que cambió la Constitución para eternizarse en el poder y que lleva en él casi tres décadas, haya hecho ahora este movimiento. ¿No hemos tenido una venda puesta para no querer ver lo que iba a suceder y que tiene razones básicamente económicas?
No tengo datos suficientes para asegurar que hayamos hecho la vista gorda o, como decía Joe Biden, no nos lo creímos
R.- No sabría responderle. Lo fácil sería decir que sabíamos lo que ocurriría y que no nos ha importado en absoluto. No tengo datos suficientes para asegurar que hayamos hecho la vista gorda o, como decía Joe Biden, no nos lo creímos. Es política al más alto nivel, pero me gustaría pensar que todos los presidentes europeos están al tanto de lo que está ocurriendo, que es un ataque brutal, en varios frentes a la vez, y además alardeando de ello gracias a las redes, que es otro aspecto terrible.
P.- ¿Qué opina del presidente ucraniano, de Zelenski, como líder? Como se sabe llegó a la política desde su profesión de actor y al principio no fue muy tomado en serio por casi nadie, ni desde los medios de comunicación ni por los propios oligarcas a los que se enfrentaba, pero en los últimos días está encabezando una resistencia casi heroica.
R.- ¿Dónde está el líder en esos cuerpos? Sale cuando se necesita. Salir y arriesgarse a dar la cara es un rasgo de ese liderazgo, cercano y familiar con el que no se contaba. Se le ha menospreciado y se ha dicho de todo de él, pero ahí está. El único espejo en el que pueden mirarse ahora los ucranianos es en su actitud heroica y eso es muy valioso. Tiene que ser muy difícil, pero él saca fuerzas de donde no las hay porque sabe que su gente le necesita. Eso es muy importante.
P.- Fíjese cómo hemos llegado a esta crisis después de dos años que han sido tremendos para toda la humanidad. Hemos pasado desde la supervivencia frente a un virus que no conocíamos y que ha cambiado y devastado nuestras vidas a la realidad de una guerra que parece habernos hecho olvidar la pandemia y ponernos frente a otra realidad también brutal, la de la guerra.
Afortunadamente aquí no estamos en guerra, pero ya veíamos el final del túnel y de repente aparece esto… ¿Estamos locos?
R.- En una de las primeras imágenes de esta guerra se puede ver cómo un coche ha impactado contra un árbol, hay una persona fallecida… ¡y otra está mirando la escena con una mascarilla! Yo pensaba: ¿Dónde vas, protegiéndote de un virus en una guerra? Es la imagen del colapso cerebral, es impresionante. Afortunadamente aquí no estamos en guerra, pero ya veíamos el final del túnel y de repente aparece esto… ¿Estamos locos? ¿Qué está pasando? ¡No nos dejan respirar!
P.- Tuvieron ustedes incluso que interrumpir su reunión de presidentes autonómicos en La Palma…
R.- Sí. En un principio, a pesar de que el presidente Sánchez estaba citado en Bruselas para una reunión al más alto nivel, la intención era celebrarla, pero finalmente, debido al cariz de los acontecimientos, se decidió que había que cancelarla porque la situación era muy grave y era lo más adecuado.
P.- Hablemos de política nacional y de su tierra, Concha. Como se sabe, uno de los sectores que más está sufriendo la crisis es el de la agricultura y la ganadería. ¿Cómo se han vivido estos dos años de pandemia en las bodegas y en el sector del vino en su comunidad, La Rioja?
Como no se podía salir a cazar, se ha visto un repunte en la población de conejos o jabalíes y ello ha afectado bastante a los cultivos
R.- Le diré que tanto el sector de la industria agroalimentaria como el de las bodegas ha sido esencial. Salvo las que venden en hostelería, que han pasado dos años muy malos y han tratado de vender por internet para mitigar sus pérdidas, sí han sufrido caídas incluso del noventa por ciento, el resto han trabajado más que nunca. Las conserveras, de champiñón y otros vegetales en la ribera del Ebro, han trabajado más que nunca y han funcionado bien. Se ha visto de nuevo, en fin, una gran subida de las ventas y como el sector se ha reactivado con alegría y con ganas de salir a la calle a consumir por parte de la gente. No hemos llegado al nivel de exportación que teníamos antes de la pandemia, pero estamos muy cerca. Le daré un dato curioso; como no se podía salir a cazar, se ha visto un repunte en la población de conejos o jabalíes y ello ha afectado bastante a los cultivos. Ahora toca organizar de forma correcta esa sobredimensión de estos animales.
P.- Hablemos de los famosos Fondos Europeos. ¿Cómo se está llevando a cabo su gestión? Ustedes tienen en su comunidad importantes proyectos en marcha.
R.- Hemos tenido que ir aprendiendo cómo funcionaba este mecanismo. Llegará dinero que las comunidades tendremos que repartir y será entre proyectos a concurrencia competitiva, pero vamos viendo con el devenir que no necesariamente. Nos vamos adaptando. Hay dos tipos: unos que han sido extraordinariamente valiosos para todo lo que tiene que ver con reforzar los servicios públicos, sanidad, servicios sociales y educación. Gracias a ellos hemos podido abrir escuelas rurales, que han evitado que muchos alumnos y los padres tuvieran que desplazarse en autobús a pueblos cercanos más grandes. Hemos conseguido, por lo tanto, ese refuerzo y también hemos conseguido residencias para personas mayores, porque se ha visto una necesidad, de aquí a futuro, en ese aspecto.
Los fondos han servido también para invertir en sanidad, para hacer más grande la unidad de los intensivos y habilitarla. Si eso ha sido en toda España, bienvenidos sean. En La Rioja hemos llegado a un porcentaje cercano al 1 por ciento, más de lo que en principio teníamos asignado, y ha sido un dinero aprovechado. Ahora llega la segunda parte: convocatorias para rehabilitación de viviendas, para cargadores eléctricos, para renovar la flota de vehículos y facilitar el acceso a eléctricos y sostenibles.
En este caso, la tarea que está resultando compleja es la de animar a PYMES en esa inversión, también a particulares en rehabilitación de viviendas. Tenga en cuenta Euprepio que en La Rioja, de 174 municipios, 120 tienen menos de 1.000 habitantes; o les llevas de la mano o no hay posibilidad. Veo estos fondos como algo maravilloso y necesario: nos van a ayudar a digitalizar, a modernizar, a innovar, a ser más eficientes. Tenemos que invertir en personal, en cualquier caso. Nosotros no hemos utilizado servicios de consultoría por el momento, sino que hemos conseguido gestionarlo todo con personal del equipo de gobierno, pero la tarea es inmensa, porque va a llegar mucho más, pero las necesidades son muchas.
P.- ¿Cuándo llegará el AVE a La Rioja?
R.- Se ha convertido en un mito y le pondremos un monumento a quien lo traiga. Llevamos muchos años de retraso porque no se hicieron bien las cosas en las legislaturas anteriores. Llevamos dos años y medio gobernando y hemos conseguido, precisamente, que a través del secretario General de Infraestructuras, tras una reciente visita de la ministra, exista ya el estudio pertinente para que se diseñe el primer tramo para esta alta velocidad que es el Logroño-Castejón. Empiezan las obras en 2023. Lo vamos consiguiendo y estoy contenta.
P.- La crisis abierta en el PP ha llevado a quien era el líder indiscutido, el señor Casado, en pocos días y contra pronóstico, a abandonar en medio de una batalla fratricida, de una lucha política como yo no había visto otra, ni siquiera en mi país. Ahora nos encontramos con un nuevo liderazgo, el del señor Feijóo. ¿Qué opina de lo que ha pasado?
R.- Si hace un mes nos hubieran dicho que esto iba a pasar no lo hubiéramos creído. Le digo también que, visto desde fuera, desde el pueblo, ese liderazgo del señor Casado no lo veíamos. Casado no convencía a nadie. Estaba ocupando un sitio que al PP no le corresponde, el agresivo, el radical, no lo identificábamos. Me da pena que le haya ocurrido esto al PP, pero desde aquí, desde La Rioja, no lo veíamos. Tenemos claro, eso sí, que algo ha pasado. Espiar a un compañero, supuestamente, es feo, como lo es el sacar cremas que robas… si se tenía costumbre de ello, está mal. También le digo que destinar dinero, que tendría que haber ido directamente a la compra de material sanitario, al final no haya ido, y que se diga que tampoco era para tanto, pues demuestra que no gestionamos bien estos conflictos, como le pasa al PSOE.
P.- Se refiere a aquel ‘sangriento’ Comité Federal del 1 de octubre de 2016, que fue una ‘escabechina’, aunque aquello duró apenas un día y después… ¡anda que no ha vuelto el presidente!
R.- Así lo decíamos en los grupos de ‘whatsapp’, pero esto no nos viene bien a la política. La mayor parte de los políticos trabajamos horas y horas para mejorar la vida de las personas, pero ocurren estas cosas y nos vienen muy mal, tanto a nivel de país, porque desestabiliza, como individualmente.
P.- Ha sido horrible porque si hay un tipo de hechos que pueden disuadir a los más jóvenes de entrar en política son estos: ver como los compañeros de partido se matan. ¿Lo que ha ocurrido hará que Vox suba como la espuma?
Hablan de la Ley de Memoria Histórica, dicen que hay que derogar la de Violencia de Género… ¿de qué estamos hablando? Aquí tiene que dar una lección el PP
R.- Es lo peor que nos puede pasar, pero estamos subiendo. Se vio en Castilla y León que, cuando el PP no ocupa el lugar que tiene que ocupar, se faculta que un grupo que no tendría que serlo se convierta en bisagra. Hablan de la Ley de Memoria Histórica, dicen que hay que derogar la de Violencia de Género… ¿de qué estamos hablando? Aquí tiene que dar una lección el PP. Dice que no va a hacer un gobierno xenófobo, ni machista, pero… ¿se va a hacer un gobierno inclusivo? Con Vox, no. En La Rioja no hay un solo diputado de Vox y sólo un concejal en un municipio, pero como el PP no haga lo que tiene que hacer, vamos a tener problemas con esta gente. Ese estilo populista, tras salir de una crisis en la que ha estado en juego la vida de la gente, y caer en una etapa en la que todo valga, me da un poco de miedo.
P.- Es usted una mujer muy cercana, pero a la vez presidenta de su comunidad. ¿Cómo ha cambiado su vida, si es que ha cambiado?
R.- Muchísimo, pero sigo teniendo las mismas costumbres, con los chicos y con mi marido. Ha cambiado radicalmente, pero mi compromiso con La Rioja sigue siendo el mismo. Yo estudié en Salamanca, pero cuando volví y vi el primer día a un chico con la bandera de La Rioja, casi me tiro a su cuello. Somos una tierra chica pero muy rica, a la que hay que cuidar y revitalizar. No nos podemos quedar atrás. Estamos al lado de vascos y navarros y eso nos debe hacer espabilar. Esa es mi tarea.
P.- ¿Qué ambición guarda para su futuro?
R.- Ganar las siguientes elecciones por mucho. Cuanto antes. Las elecciones pasadas tardé tres meses y se me hizo mucho, después de 24 años. Ese es mi máximo objetivo, porque así podremos hacer más grande La Rioja.
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