El colectivo de presos de ETA agrupado bajo las siglas EPPK ha reconocido avances en los "logros en algunas de nuestras reivindicaciones" como las referidas al acercamiento a cárceles de Euskadi y Navarra, aunque perciben que se "sigue imponiendo una política (penitenciaria) de excepción".

Así lo asegura este grupo en un comunicado difundido por el diario Gara en el que se reafirman en el camino emprendido para conseguir la libertad de todos los reclusos de ETA y no dicen nada específico sobre los recursos interpuestos por la Fiscalía a la concesión del tercer grado penitenciario por parte de los jueces de Vigilancia Penitenciaria.

El colectivo de presos de ETA destaca que "el mapa de la dispersión y los alejamientos" es "muy diferente al de hace pocos años. Hoy en día, la mayoría de compañeros y compañeras está en cárceles de Euskal Herria", señala en referencia a los traslados de estos reclusos a cárceles próximas a Euskadi y Navarra habidos el año pasado.

Aseguran también que dichos logros se han conseguido "por los pasos dados por presos, por un lado, y por las movilizaciones y el trabajo realizado por las instituciones y por la ciudadanía en la calle, por otro".

Pese a apreciar esta mejoría de su situación, el colectivo de presos de ETA ha reiterado su disposición ha "dejar sin efecto los criterios de excepcionalidad y las trabas que se nos ponen en la práctica", y enfocar su labor en "superar las consecuencias del conflicto y encauzar la salida a la calle de las personas presas".

Por ello, ha reclamado a la sociedad vasca, a los agentes sociales y a las instituciones que "remen" en esa dirección porque "sumando nuestros pasos y el trabajo que se hace en la calle, alcanzaremos los objetivos".

Por otro lado, ha denunciado que la pandemia ha afectado especialmente en las cárceles, "por las medidas restrictivas aplicadas para los contactos entre los presos y sus familiares.