La diputada y secretaria general del Grupo parlamentario Vox, Macarena Olona, ha intervenido por última vez en una sesión de control del Gobierno. Antes del inicio de la campaña electoral en Andalucía, la 'tercera' de Santiago Abascal en la cámara, tal y como anunció el partido hace una semana, abandonará su acta de diputada y cederá su escaño en el hemiciclo a un nuevo representante por Granada.
Precisamente, Olona, por lo sucedido en la provincia y en la localidad donde se ha empadronado para poder presentarse a los comicios, en Salobreña, ha querido centrar su intervención frente al ministro de la presidencia, Félix Bolaños, para hacerle "un resumen de los acontecimientos" vividos en relación con la cancelación y posteriormente reactivación de su candidatura. "25 días para las elecciones y aquí me tiene: candidata en Andalucía y vecina de Salobreña a pesar de su plan para ilegalizar mi candidatura y robarle el voto a los andaluces con un montaje chusquero en la que María Eugenia Rufino -la alcaldesa de Salobreña- ha sido su colaboradora necesaria.
Me han querido "dar de baja del padrón para ilegalizar mi candidatura. ¡A mí! No a los inmigrantes ilegales que están en Andalucía con tarjetas sanitarias que pagan los andaluces", ha expresado Olona, que lucía una camiseta del torero Morante de la Puebla. Algo, ha indicado, que tendrá consecuencias: denunciará por prevaricación administrativa y por delito electoral a la alcaldesa de Salobreña. "Todo es legal. Y le agradezco que mi localidad haya abierto los telediarios nacionales: Macarena de Salobreña", ha detallado.
El titular de presidencia, Bolaños, ha lamentado que Olona abandone las Cortes, porque le gusta "debatir" con ella. "Si cumple su palabra y abandona su escaño, lamentaré no poder debatir más con usted. Porque estoy en política para combatir todo lo que usted representa: el odio, la crispación, el matonismo, los indultos o los privilegios", le ha contestado.
Pese a los comentarios de la candidata de Vox en Andalucía en torno a su empadronamiento, Bolaños le ha seguido acusando de utilizar "trampas". "Qué pueden esperar los andaluces y los españoles de Vox y la ultraderecha; de la candidatura Olona-Moreno Bonilla: trampas y más trampas, ningún escrúpulo ni límite legal o ético", ha afirmado.
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